El líder del Movimiento Cinco Estrellas (M5S), Beppe Grillo, ha echado este miércoles más leña al fuego de las ya de por sí tensas relaciones entre los partidos italianos calificando a los responsables de las principales formaciones de «padres puteros de la política», al tiempo que les ha pedido que dejen de «dar por el culo» con la «gobernabilidad».
Grillo se ha despachado en una entrada en su blog con un texto en el que ha cargado contra los principales responsables políticos, incluidos los líderes del Partido Democrático, Pier Luigi Bersani, y el del Pueblo de la Libertad (PDL), Silvio Berlusconi, así como el actual primer ministro, Mario Monti.
En plenas negociaciones para la formación de un gobierno, Grillo ha calificado de «padres puteros» a estos dirigentes y les ha pedido que dejen de «dar por el culo» con la «gobernabilidad» del país.
Asimismo, el líder del Movimiento 5 Estrellas ha acusado a sus rivales de aprovecharse de las generaciones más jóvenes, de destruir el tejido industrial y la investigación y de recortar el estado del bienestar durante los veinte años en los que han «gobernado alternativamente». Grillo les ha recriminado que durante estas dos décadas no hayan combatido la corrupción y, en cambio, hayan reconvertido la ley electoral en una «caricatura inconstitucional».
Bersani ha respondido a los calificativos de Grillo con ironía, felicitando a «los salvadores de la patria». «Uno puede insultar cuando esta fuera del Parlamento, pero cuando está dentro debe explicar qué va a hacer por el país», ha añadido, según declaraciones recogidas por el periódico ‘La Repubblica’.
Grillo y su partido se convirtieron en la gran sorpresa de las elecciones legislativas de febrero al quedar terceros, sólo por detrás de la coalición de centro-izquierda liderada por Bersani y de la de centro-derecha encabezada por Berlusconi.
Negociaciones
El presidente de Italia, Giorgio Napolitano, ha encargado a Bersani que encabece las negociaciones para tratar de formar gobierno, sin que hasta ahora los encuentros del líder del PDL con el resto del partido hayan resuelto la actual situación de estancamiento.
El portavoz del Movimiento 5 Estrellas (M5S) en el Senado, Vito Crimi, ha reiterado este miércoles tras reunirse con Bersani que no apoyarán la investidura de un gobierno de esta formación, cuya coalición es la que consiguió más votos en las elecciones del pasado mes de febrero.
Crimi ha explicado que los parlamentarios del M5S han decidido por unanimidad no dar su confianza a «estos gobiernos», por lo que están obligados por los estatutos de la formación a respetar esta decisión y ha recordado el reciente enfrentamiento entre el M5S y el Partido Democrático debido a la elección de Pietro Grasso como presidente del Senado, según recoge la agencia de noticias italiana AGI.
Bersani, en cambio, ha apelado a la «responsabilidad» del M5S y «permita la formación de gobierno». «Estoy dispuesto a asumir una responsabilidad enorme, pero pido a los demás que asuman una pequeña parte», ha señalado Bersani. «Lo que le pido a las fuerzas políticas es que no impidan este comienzo. Existen muchas maneras», ha argumentado el líder del centro-izquierda italiano.
Sin embargo, el propio Crimi ha descartado que se vayan a ausentar de la votación para facilitar una mayoría democrática. «Descartamos salirnos de la sala», ha apostillado. «Somos los últimos que se sienten responsables de esta situación. Somos el resultado, no la causa», ha añadido.
Monti, cansado
Italia cuenta en la actualidad con un gobierno en funciones liderado por Monti. Los resultados logrados en los últimos comicios por la coalición de centro que apadrinó el actual primer ministro han dejado a Monti sin apenas peso en el actual escenario de negociaciones y a la espera de ver cómo evoluciona la situación.
«Mi gobierno no ve la hora de ser liberado» de sus funciones, ha confesado este miércoles Monti durante un debate parlamentario en el que se ha discutido el conflicto por el traslado a India de dos marinos acusados de matar a dos pescadores. La decisión del Gobierno de permitir el envío de los militares de vuelta al país asiático provocó el martes, y por sorpresa, la dimisión del ministro de Exteriores.