Los ministros de Asuntos Exteriores de la UE han manifestado este lunes su preocupación por la escalada de violencia en el este de Ucrania, han subrayado la necesidad de evitar que se repita el caso de Crimea y han amenazado a Rusia con aprobar más sanciones. El ministro de Exteriores británico, William Hague, ha asegurado que «no puede haber ninguna duda real» de la implicación de Rusia detrás de las nuevas acciones desestabilizadoras en ciudades del este de Ucrania y ha pedido que la UE responda con «más sanciones» a esta escalada tras insistir en que su opinión lo ocurrido en el este «ha sido planeado y promovido por Rusia».
«Por tanto, tiene que haber una respuesta internacional clara y unida», ha defendido Hague, que ha asegurado que es «importante» discutir «el calendario y alcance» de nuevas sanciones a aplicar a individuos en Rusia y completar los preparativos de la fase de sanciones económicas «de amplio alcance». Sin embargo, ha admitido que éstas últimas dependerán «de la evolución de los acontecimientos». El viceprimer ministro y titular de Exteriores irlandés, Eamon Gilmore, ha explicado que los Veintiocho discutirán «añadir (nombres) a la lista» de sanciones individuales y «el calendario para la fase tres» de sanciones económicas y ha avanzado que la Comisión les explicará del estado de preparación de éstas, que presentará formalmente «más adelante en la semana».
Gilmore ha admitido que los acontecimientos en el este de Ucrania son algo «muy serio» y ha admitido que «parece que hay una implicación coordinada» de Rusia a la luz de «muchas reminiscencias de lo que ocurrió en Crimea antes de la anexión». El ministro de Exteriores holandés, Frans Timmermans, ha admitido que «sería demasiado pronto» para aprobar sanciones económicas contra Rusia pero ha defendido que están «bien preparados» en cuanto a opciones y ha defendido que «no se han agotado» las posibilidades de la fase dos de las sanciones, es decir, ampliar la lista de dirigentes ucranianos y rusos sancionados.
Timmermans ha dejado claro con todo que las acciones en el este constituyen «un desarrollo muy preocupante» y los acontecimientos parecen «muy similares a lo que ha ocurrido previamente en Crimea» y, por ello, hay que estar preparados para ir a sanciones económicas «si necesario» y «si no hay cambio en la situación». «Necesitamos estar preparados para hacer esto si no hay cambio en la situación», ha explicado, insistiendo en que los Estados miembros deben poder «tomar acción rápida si necesario».
El ministro de Asuntos Exteriores danés, Martin Lidegaard, ha defendido que «es tiempo de discutir nuevas sanciones» y ha recomendado «enviar una señal clara a Rusia» tras los nuevos episodios violentos en varias ciudades del este de Ucrania este fin de semana porque, en su opinión, «no hay ninguna duda de que Rusia está implicada».
«Estamos dispuestos a discutir al menos nuevas sanciones. Hay varias opciones. Se puede ampliar la lista (de individuos sancionados), que es lo que Estados Unidos ha hecho. Se puede igualmente preparar lo que llamamos la fase tres» que abre la puerta a sanciones económicas contra Moscú, ha explicado el danés en declaraciones a la prensa a su llegada a la reunión con sus homólogos en Luxemburgo, donde discutirán la respuesta de la UE tras los últimos altercados en Ucrania.
«Estamos abiertos a todas las posibilidades», ha recalcado el jefe de la diplomacia danesa, que ha dejado claro que resulta «justo» una «ampliación» de las sanciones actuales o «nuevas sanciones». «No estamos preparados hoy para decidir la fase tres», ha admitido.
El ministro de Exteriores belga, Didier Reynders, ha defendido la necesidad de «intentar hacer entrar en razón a Moscú» y si es necesario con más sanciones para evitar llegar «al escenario que hemos conocido en Crimea» en otras localidades del este del país. «Quizá haya que ir a sanciones económicas» contra Moscú, ha admitido el belga, que ha dicho que Rusia «probablemente también» tiene militares en el este de Ucrania y no sólo en la frontera.
El ministro de Exteriores lituano, Linas Linkevicius, ha denunciado que lo que ocurre en el este de Ucrania es «continuación de lo que comenzó en Crimea» por parte de Rusia y ha defendido «ampliar la segunda fase de sanciones y continuar la preparación de otros pasos» como sanciones en el sector bancario y la venta de armas en respuesta.
Peticiones a Moscú
El ministro de Exteriores sueco, Carl Bildt, ha dejado claro que tiene que pedir a Moscú que revoquen «el mandato de invasión», que «claramente se disocien de los grupos armados ilegales» en Ucrania que han ocupado edificios públicos y que «comiencen a retirar» el «número bastante grande» de militares destacados en la frontera. También ha defendido que hay que «muy preparados para avanzar» con sanciones, «en particular si Rusia no desescala».
Su homólogo polaco, Radowslaw Sikorski, también ha confiado en que los Veintiocho reiteren a Rusia este lunes que «más sanciones son posibles si no ocurre ninguna desescalada» y ha insistido en que necesitan que Moscú revoque su «autorización de usar la fuerza en el país vecino» y que «retire sus tropas» de la frontera.
También ha pedido medidas en «posibles disrupciones en los suministros de gas a la UE» como «acelerar» la «unión energética», construir interconectores y la posibilidad de «autorizar» a la Comisión en el terreno de «las adquisiciones de gas» conjuntas. «Necesitamos gas ruso pero Rusia necesita nuestro dinero y por tanto tenemos que poder obtener una oferta mejor para nuestros consumidores», ha justificado el polaco.
Italia y Luxemburgo son los países que más abiertamente han rechazado la posibilidad de pasar ya a sanciones económicas contra Rusia. La ministra de Exteriores italiana, Federica Mogherini, ha insistido en que el diálogo es la única salida «posible» a la crisis y ha rechazado la opción de pasar a sanciones económicas contra Rusia respondiendo con un escueto «no» cuando se le ha preguntado si ha llegado el momento de pasar a la tercera fase tras los últimos incidentes en el este del país.
Su homólogo luxemburgués, Jean Asselborn, también ha rechazado esta opción. «Con sanciones no vamos a resolver el problema. Nuestro trabajo principal hoy es hacer todo para que esta conferencia del próximo jueves en Ginebra se pueda celebrar y en un clima sereno», ha justificado.
Misión europea para reformar la policiía ucraniana
El ministro sueco también ha defendido la propuesta conjunta de Suecia, Polonia y Reino Unido de enviar una misión de la UE para «ayudar» a Ucrania en materia de reforma policial y judicial porque «Ucrania está muy interesada en esto» aunque ha admitido «lleva algo de tiempo». «Es cuestión de perfilarlo y enmarcarlo», ha precisado, aunque «muchos» países han cuestionado que sea el momento oportuno, entre otros por temor a provocar a Rusia, entre ellos España.
El ministro de Exteriroes irlandés ha precisado que de momento sólo se discute enviar un equipo de expertos de la Comisión y del Servicio Europeo de Acción Exterior y no se excluye la posibillidad de una misión más adelante, insistiendo en la necesidad de coordinar con el trabajo de la OSCE y el Consejo de Europa.