El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, ha reiterado este sábado su voluntad de reanudar en cualquier momento de los próximos tres meses las conversaciones de paz con Israel, suspendidas por el Estado hebreo tras la firma el miércoles del acuerdo de unidad palestino, siempre y cuando Tel Aviv excarcele a una treintena de presos palestinos cuya liberación fue acordada por ambas partes y detenga inmediatamente la construcción de asentamientos en territorio ocupado.
Abbas realizó estas declaraciones, las primeras desde la suspensión de las conversaciones, ante una representación de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en Ramala, la capital de Cisjordania, donde propuso un plazo adicional de tres meses para encauzar de nuevo las negociaciones, que expiran el próximo 29 de abril.
«¿Cómo podemos reiniciar las conversaciones? Nosotros no creemos que existan obstáculos para hacerlo, pero esos 30 presos deben ser puestos en libertad», declaró el presidente palestino en comentarios recogidos por el diario hebreo Haaretz.
Este grupo de prisioneros forma parte de un amplio acuerdo de liberación que Israel se negó a culminar al tiempo que los palestinos enviaron propuestas de adhesión a 15 agencias de Naciones Unidas para legitimar su estatus político, algo que Israel solo admite mediante una vía exclusiva: la de las conversaciones bilaterales.
«Pondremos nuestra hoja de ruta sobre la mesa. Dispondremos de tres meses para discutir. Durante ese período, toda la actividad en los asentamientos israelíes debe cesar completamente», añadió el presidente palestino, quien aprovechó para tranquilizar a Israel diciendo que, a pesar del acuerdo de unidad con Hamás –que Israel considera organización terrorista– la OLP ha sido y será el único interlocutor válido en estas conversaciones.
Obama, decepcionado
En rueda de prensa en Seúl, el presidente estadounidense Barack Obama consideró este viernes que el acuerdo palestino «no ayuda» al tratarse de una de las varias decisiones que ambas partes han tomado que perjudican las opciones de llegar a un acuerdo de paz.
«Se podría llegar a un punto en el que simplemente tenga que haber una pausa y que ambas partes analicen las alternativas», ha considerado Obama.
Aunque el presidente estadounidenses ha asegurado que no está dispuesto a abandonar la búsqueda de la paz en Oriente Próximo, ha lamentado que «lo que no hemos visto, con franqueza, es la voluntad política de adoptar decisiones duras, y eso ha ocurrido en ambas partes».
Obama ha reconocido este viernes que lograr un acuerdo de paz entre palestinos e israelíes ha sido siempre una «apuesta perdedora» para su Administración, que fracasó en su iniciativa de paz durante su primer mandato. Pero, ha insistido, «no me excuso».