El presidente del partido nacionalista irlandés Sinn Féin, Gerry Adams, ha reiterado que no tiene ningún tipo de relación con el asesinato de Jean McConville, cometido por el IRA en 1972, por el que ha pasado cuatro días detenido por la Policía norirlandesa, y ha denunciado una campaña «maliciosa y siniestra» para implicarle en este caso.
«He rechazado todas las acusaciones que se han realizado contra mí (…). Soy inocente de cualquier relación o cualquier conspiración para secuestrar, asesinar o enterrar a la señora McConville«, ha afirmado Adams en rueda de prensa desde Belfast. El líder republicano ha atribuido esta campaña a «elementos que están erigiendo obstáculos», una «vieja guardia», el «lado oscuro del sistema británico» y del Servicio de Policía de Irlanda del Norte (PSNI).
Adams se ha referido a los prolongados interrogatorios a los que fue sometido y en los que solo le presentaron como pruebas las conocidas como cintas de Boston, unos documentos sonoros «refrito de libros y entrevistas», «un proyecto dudoso» basado en «rumores».
En cualquier caso ha defendido las aspiraciones de justicia que demandan los familiares de McConville. «He trabajado duro con otros para que esta injusticia se repare y para la devolución de los cuerpos de otros asesinados durante el conflicto que fueron enterrados en secreto por el IRA, y seguiré haciéndolo», ha afirmado.
En cuanto a las condiciones de su detención, Adams ha explicado que no comió nada durante los dos primeros días de arresto porque lo que le ofrecían era «incomible» y ha desvelado que ha presentado una queja formal relacionada con el tiempo que ha pasado bajo custodia.
Adams ha repetido el argumento lanzado desde el Sinn Féin sobre la oportunidad política de su detención, en plena campaña para las elecciones europeas. «Quienes autorizaron esto no tomaron la decisión estratégica correcta desde el punto de vista policial», ha indicado.
«Hay muchas cosas en este proceso y en este sistema que no se corresponden con los estándares policiales de 2014 (…). A pesar de ello, quiero dejar claro que apoyo al PSNI. Seguiré colaborando para construir un servicio policial genuinamente cívico», ha asegurado.
El líder republicano ha aprovechado para destacar los logros de los últimos años de diálogo y los avances en el proceso de paz. «Hay muchas mujeres que no tendrán que soportar la carga de ir a los cementerios, de todos los bandos (…) Hay jóvenes (…) que no han visto nunca los coches blindados, los carros de combate, las pistolas, a los soldados británicos, que no han visto nunca a ningún asesinado o herido», ha destacado.
McConville fue secuestrada en Belfast en 1972 pero su cuerpo no apareció hasta 2003, en una playa del condado de Louth. McConville, de 37 años y madre de diez hijos, fue raptada después de que el IRA la considerase, por error, como una informante de las autoridades norirlandesas. Según las investigaciones realizadas hasta la fecha, permaneció retenida en una o más viviendas antes de ser asesinada y enterrada.
Adams fue detenido el pasado miércoles en relación con este caso y la Policía logró una prórroga judicial para prolongar su arresto hasta las 20.00 horas (21.00 hora peninsular española) de este domingo. Tras su puesta en libertad, Adams ha salido de la comisaría por un acceso secundario para evitar una concentración unionista
Desde el Sinn Féin denuncian que en los cuatro días detención, Adams ha sido sometido a hasta 17 horas seguidas de interrogatorio. Este sábado, unas 600 personas participaron en Belfast en el descubrimiento de un mural de homenaje a Adams. Los republicanos consideran que la detención tiene motivos políticos y busca afectar a la campaña electoral.
Mientras, desde los partidos unionistas acusan al Sinn Féin de estar chantajeando a la Policía con sus críticas. El propio ministro principal de Irlanda del Norte, Peter Robinson, ha denunciado las últimas declaraciones contra la Policía de republicanos como su propio 'número dos', Martin McGuinness, quien atribuyó el arresto de Adams al «lado oscuro» de la Policía norirlandesa.