Unos científicos alemanes han descubierto en el Sáhara Marroquí una araña que asombra por sus espectaculares volteretas y sus movimientos.
Como si se tratara de un acróbata circense o una gimansta olímpica a lo Nadia Comaneci, el peculiar arácnido corre un pequeño lapso de tiempo, después estira las patas delanteras, empieza a dar vueltas en el aire y vuelve a tocar el suelo con sus patas traseras.
La araña, denominada Cebrennus rechenbergi, se desplaza de esta extraña manera para huir de sus depredadores.