El gobernador del estado mexicano de Guerrero, Ángel Aguirre, ha anunciado este jueves su renuncia al cargo tras la crisis abierta por la desaparición de 43 estudiantes en el municipio de Iguala. «Para favorecer un clima político, que ponga la atención en las prioridades, el día de hoy (…) he decidido solicitar licencia al Congreso del Estado», ha señalado.
En una rueda de prensa, Aguirre ha insistido en que la atención no se debe centrar en si el gobernador se queda o se va, sino en «encontrar a los 43 estudiantes y castigar a los responsables», por lo que ha decidido echarse a un lado y poner su cargo a disposición del Congreso, tal y como ha informado el diario mexicano 'Milenio'.
Esta decisión llega después de varias semana de movilizaciones en las que los manifestantes han exigido la dimisión del gobernador de Guerrero por su mala gestión de la crisis. «En este escenario de tragedia me niego en que el debate público se centre en que si el gobernador debe o no permanecer en el cargo», ha añadido Aguirre.
El gobernador de Guerrero ha explicado que los hechos ocurridos en Iguala obligaron a una intervención del Gobierno federal. Sin embargo, ha asegurado que no por ello su Ejecutivo dejó de trabajar en las labores de rescate y en la localización de los responsables, algo que muchos manifestantes critican.
«Esta es una decisión responsable para seguir sirviendo al pueblo y al estado que me vio nacer, al pueblo al que me debo y al que he dedicado gran parte de mi vida», ha aseverado Aguirre, que ha afirmado que asumió con responsabilidad esta emergencia, al tiempo que ha pedido una reflexión nacional «para construir una estrategia de seguridad nacional efectiva que evite que ocurran tragedias» de este tipo.