Al menos seis personas han muerto este domingo en el bombardeo de un helicóptero israelí sobre efectivos del partido-milicia chií libanés Hezbolá en la localidad siria de Quneitra, cerca de la frontera con Líbano.
Entre los fallecidos estaría Yihad Mugniyah, hijo del histórico comandante de Hezbolá Imad Mugniyah, asesinado en Damasco en febrero de 2008 en un atentado que Hezbolá atribuye a Israel. También ha muerto el comandante de Hezbolá Mohammad Issa, alias 'Abu Issa', y un oficial iraní, Abu Ali Tabtabai.
Desde Hezbolá han confirmado el ataque y «el martirio de varios muyahidines» que realizaban una inspección en la localidad de Quneitra, cerca de la frontera con Líbano.
En un comunicado publicado por el departamento de comunicación de la formación y recogido por la cadena de televisión libanesa Al Manar, vinculada al grupo, se cifra en seis el número de muertos en el bombardeo. Horas antes, el diario libanés 'The Daily Star' informó acerca de nueve muertos en el ataque.
Mientras, la agencia de noticias estatal libanesa NNA ha informado de que el Ejército israelí se encuentra en estado de alerta en la región de las granjas de Shebaa, territorio ocupado por Israel fronterizo tanto con el territorio controlado por las fuerzas sirias como con Líbano.
Anteriormente se había informado de que helicópteros israelíes habían lanzado un ataque con dos misles sobre un convoy armado en la región de Quneitra.
Según la televisión libanesa Al Maydeen, los helicópteros han lanzado los proyectiles contra un convoy que se desplazaba en las inmediaciones de Quneitra, una de las localidades estratégicas que se disputan los bandos que combaten en la guerra siria.
Hezbolá combate en Siria apoyando a las fuerzas leales al régimen del presidente sirio, Bashar al Assad, contra las milicias sublevadas. Además, en el verano de 2006 protagonizó una guerra con el Ejército israelí.
No es la primera vez que surgen informaciones de ataques militares israelíes en suelo sirio. En otras ocasiones, Israel ha bombardeado arsenales de armamento destinados a Hezbolá. En todo caso, Israel siempre niega oficialmente cualquier intervención aunque reconce su intención de impedir que lleguen armas a grupos como Hezbolá.
El ministro de Información de Siria, Omran al Zubi, ha afirmado que el bombardeo ejecutado por el Ejército de Israel contra es una prueba del apoyo de Tel Aviv a los grupos terroristas presentes en el país.
En una entrevista concedida a Al Manar, Al Zubi ha acusado a Israel de dar apoyo al grupo armado Frente al Nusra, rama de la organización terrorista Al Qaeda en Siria, y ha argumentado que el Gobierno israelí pretende que la formación yihadista cree una 'zona tapón' en la frontera entre ambos países.
Asimismo, ha criticado al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, por acudir a la manifestación de París en condena por los atentados en la capital gala «al tiempo que su Gobierno apoya este terrorismo en Gaza, Jerusalén, Líbano y Siria».
Este mismo domingo, tres militares libaneses han tenido que recibir atención médica por problemas respiratorios causados por gases lacrimógenos lanzados por fuerzas israelíes cerca de la frontera, en la región de Ayta Shaab. «Lanzaron dos bombas de gas lacrimógeno junto a la verja», informa la agencia de noticias oficial libanesa, NNA.
La televisión libanesa Al Manar, afín a Hezbolá, ha informado de que el lanzamiento de gases era para permitir a militares israelíes izar una badera israelí en la frontera.