La canciller de Alemania, Angela Merkel, dijo este lunes que, como jefa de Gobierno, tiene el deber de proteger el derecho de manifestación independientemente de quién recurra a él y ha ofrecido protección al movimiento islamófobo PEGIDA, que el domingo canceló una manifestación por amenazas.
PEGIDA tenía previsto celebrar en Dresde su marcha semanal contra el islam. La manifestación de la semana pasada, la primera tras el ataque contra la revista francesa Charlie Hebdo, congregó a unas 25.000 personas, pero la de este lunes fue cancelada porque uno de los líderes del movimiento había recibido amenazas de muerte.
Merkel ha defendido que el derecho de manifestación es un «principio preciado» y, como tal, debe «protegerse». «Por eso haremos todo lo posible para asegurarnos de que la libertad de manifestación está garantizada en toda Alemania», ha añadido la canciller en rueda de prensa. Merkel también ha ofrecido la ayuda federal a las autoridades estatales, responsables de la seguridad.
El ministro de Justicia, Heiko Maas, también ha coincidido en que siempre y cuando una manifestación no incumpla la ley, «está protegida por los derechos de libertad de expresión».
«Independientemente de lo que se pueda pensar de PEGIDA», ha apostillado, en alusión a un grupo que considera minoritario. En este sentido, ha dicho que «la gran mayoría de Alemania les rechaza y ha salido a las calles en las últimas semanas para protestar contra ellos».
PEGIDA, entretanto, ha advertido de que volverá a salir a la calle la próxima semana. «La amenaza no iba solo contra mí, sino también de una forma abstracta contra la manifestación y tengo el deber de proteger a la gente», ha dicho el dirigente Lutz Bachmann.