El líder mexicano del Frente Popular Revolucionario (FPR), Alejandro Gustavo Salgado Delgado, ha sido hallado decapitado, torturado y con las manos cortadas junto al paraje de Las Huilotas, una zona rural del municipio de Ciudad Ayala (Morelos), según el diario mexicano 'Excelsior'.
El pasado día 3, Delgado, de 32 años, fue secuestrado cuando salía de una asamblea popular con jornaleros de la Montaña de Guerrero que habían levantado un campamento de protesta mientras esperaban que se les proporcionara una vivienda.
Aunque en los últimos meses era conocido como promotor y organizador de gran parte de las protestas por las desapariciones de los 43 normalistas –estaba previsto que participara en las movilizaciones de este miércoles en la Universidad de Morelos y el Zócalo de Cuernavaca–, Delgado era un activista y dirigente social que trabajaba para conseguir mejores condiciones para los jornaleros de la montaña de Guerrero, una de las zonas de mayor cultivo de opio a nivel mundial.
Acusan a las autoridades estales
El propio FPR ha publicado en su página web un comunicado en el que acusan de la desaparición y muerte de Delgado a las autoridades estatales y al propio gobernador, Graco Ramírez. «El 3 de febrero fue desaparecido nuestro camarada Gustavo Salgado Delgado, militante del Frente Popular Revolucionario, y hoy aparece asesinado; responsabilizamos al Gobierno del estado de Morelos y al Estado Mexicano en general», ha sentenciado.
«Este crimen forma parte de la política de terror que implementa el Estado para tratar de amedrentar al movimiento popular en general y a nuestra organización en particular. Somos claros, este crimen nos duele al conjunto de la militancia del FPR, pero nos da más razones para tensar nuestras estructuras e impulsar la caída de este régimen de hambre y miseria, de explotación y muerte», ha advertido.
Sobre su desaparición, el FPR señaló que lo último que se supo de él fue que «se trasladó a una reunión donde permaneció hasta las seis de la tarde. Fueron los compañeros los que lo acompañaron al transporte que lo llevaría a la carretera para tomar el camión urbano de regreso a Ayala», han explicado.
El Frente apunta como posible causa de su desaparición y asesinato a las protestas de Delgado. «La actividad política de nuestro compañero ha sido constante en la defensa de la tierra para trabajarla y para la vivienda en el municipio de Ayala, para trabajadores migrantes de la Montaña de Guerrero y Oaxaca», han subrayado.
El activista asesoraba y dirigía a jornaleros de Guerrero afectados por las lluvias de los huracanes Ingrid y Manuel, trabajadores que desarrollaban su labor en los campos de caña en condiciones de explotación, por lo que, según explican sus compañeros activistas, «su presencia en la zona se había vuelto incómoda para los líderes cañeros».
Según han denunciado, «es a partir de esta situación cuando los caciques locales y el estado han mantenido constante vigilancia y hostigamiento hacia el compañero, como lo demuestra su ilegal detención el día 20 de marzo de 2014 mientras participaba en una marcha convocada por el Frente Ciudadano contra la Ley de Ingresos».
Por el momento, según ha publicado el diario mexicano 'El Universal, cuatro miembros del grupo denominado 'Los Victorinos' han sido detenidos por la Policía de Investigación Criminal como sospechosos del crimen.
De hecho, el fiscal Rodrigo Dorante Salgado ha confirmado que en la casa donde fueron detenidos estos cuatro hombres se encontraron las armas del crimen y el ordenador que Delgado llevaba en el momento de su desaparición.
La Fiscalía ha rechazado las acusaciones del FPR y ha asegurado que el crimen no responde a cuestiones políticas. Ha apuntado como posible móvil una disputa por las tierras donde reubicar a los jornaleros y por conflictos entre los dos grupos: el FPR y 'Los Victorinos', según 'El Universal'.
«Que quede claro la salida que nosotros proponemos es de revolución, arrancar de tajo a este sistema político, económico y social putrefacto (…) Por cada muerto, desaparecido, torturado, encarcelado, perseguido el pueblo ajustará cuentas», ha advertido el FPR.