«Hace un año Leopoldo llamó a la protesta pacífica y democrática en contra de los principales problemas de los venezolanos, problemas que después de un año se han incrementado y han sumido al pueblo en una profunda crisis económica, social y política«. De esta manera comienza una carta llena de sentimiento y sed de justicia.
Tintori defiende que su marido sólo «llamó a protestar contra un Gobierno al que calificó de corrupto, ineficiente y antidemocrático, responsable de los problemas que día a día agobian a los venezolanos: la inseguridad, las largas colas para comprar alimentos, el alto costo de la vida», pero siempre «de una manera pacífica y democrática«
Leopoldo cumple un año en la prisión militar de Ramo Verde. Un encarcelamiento «injusto» en el que la mujer de Leopoldo denuncia su «aislamiento y la violación constante a sus derechos fundamentales». Un ejemplo de estas aberraciones es le hecho ocurrido el pasado 13 de febrero y relatado de esta manera por Lilian Tintori: «Más de 20 hombres, encapuchados y con armas largas, irrumpieron violentamente en su celda con soplete, destruyendo todo lo que consiguieron a su paso. Rompieron las fotos de nuestros hijos pequeños, Manuela de cinco años y Leopoldo Santiago de dos. Destruyeron sus escritos, parte de su defensa y dos libros que estaba escribiendo». Desde entoces Leopoldo está aislado en una celda de castigo y no se le permiten visitas. Un hecho que no le es extraño, ya que el líder opositor venezolano ha estado seis meses sin poder recibir visitas familiares. «Ha recibido tratos denigrantes, lo han torturado psicológicamente. Hasta le han lanzado excrementos a su celda«, explica Lilian.
Lejos de perder la esperanza y mostrarse débil, Tintori afirma que «a pesar de que no he podido ver a Leopoldo desde el pasado jueves, sé que está muy fuerte. Su compromiso con los venezolanos es más fuerte que cualquier tortura, que cualquier atropello y que cualquier arbitrariedad». Lilian acaba su relato con un: «¡No podrán doblegarlo!».
La lucha de Leopoldo parece que ha encontrado respaldo internacional. Organismos como la ONU han pedido su inmediata liberación. Pero el apoyo no sólo viene desde instituciones sino de personas concretas, con sus nombres y apellidos. Entre los nombres mas ilustres que han implorado justicia para Leopoldo se encuentran el Papa Francisco, Mariano Rajoy, George Papandreou o los expresidentes Felipe González o José María Aznar.