Desde las 7:01 de la mañana del viernes los usuarios que lo desean han podido empezar a reservar su reloj inteligente para poder recogerlo a posteriori a la hora y en la tienda elegida. Estas reservas se pueden hacer en Apple Store y en la web de la compañía. Tanto si el cliente quiere ir a recogerlo a tienda o que le llegue a casa, es necesario que se haga la reserva online. La única forma de adquirir el ‘aparatito’.
España es uno de los 7 países en los que se empieza a vender, junto con México, Italia, Suiza, Corea del Sur, Singapur y Taiwán. Y se suman a otros nueve que ya lo estaban comercializando: Australia, Canadá, China, Hong Kong, Japón, Francia, Alemania, Reino Unido y, por supuesto, Estados Unidos.
Todas las aplicaciones disponibles, cerca de unas 3.500, se podrán descargar en el pequeño dispositivo, aunque muchas de ellas, la mayoría, no sirven para mucho y solamente son complementos que residen en el teléfono y mandan información imprescindible a la muñeca.
Es bonito, novedoso y mantiene la exclusividad propia de Apple, pero lo más importante: es caro. Han sacado tres modelos:
-Apple Watch Sport: es el más ‘básico’ de los tres. En aluminio en color plata o gris, tiene diez combinaciones y el precio puede variar entre los 419 y los 469 euros.
-Apple Watch: en acero inoxidable. Su precio oscila entre los 699 euros y los 1.269, dependiendo del modelo que se elija entre los veinte disponibles.
-Apple Watch Edition: el más exclusivo de todos, en oro y eligiendo entre amarillo o rosa. Hay ocho modelos y el más ‘económico’ cuesta 11.200 euros hasta los 16.400 del más exclusivo de todos.
Hay tres modelos: Watch Sport, Watch y Watch Edition
Como ocurre con el resto de productos de la manzana, Apple Watch es un complemento más a la variedad de productos de la compañía, por lo que, solo podrán disfrutar de él los clientes de un Iphone, ya que es considerado un accesorio del teléfono.
Problemas
La demanda ha sido muy superior a lo esperado y la disponibilidad ha sido limitada, por ello la necesidad de una reserva vía internet, ya que no es plato de buen gusto llegar a la tienda a comprar un producto que no tiene stock.
El no ser un reloj al uso, es necesario que se cargue, por lo que el usuario tiene que estar pendiente cada noche de que no se le olvide. Un uso normal durante el día dejaría el móvil con cerca del 30% el llegar la noche, por lo que es imprescindible su carga en ese momento si no se quiere que se apague y de verdad no sirva más que para adornar la muñeca.