Después de modernizar el billete de cinco, diez y veinte euros, le ha llegado el turno al billete de 50 euros, que hasta la fecha es otro de los billetes más usados y falsificados de Europa junto con el de veinte euros. Este nuevo billete entrará en circulación este 4 de abril con nuevas medidas de seguridad en su diseño.
El BCE anunció meses atrás el nuevo diseño del billete que se encuentra dentro del marco de la serie Europa, que hace referencia a estos nuevos modelos de billetes. El encargado de crear el nuevo modelo ha sido el diseñador gráfico alemán Reinhold Gerstetter. Más adelante, la serie Europa, se complementará con la puesta en circulación de los nuevos modelos de billetes de 100 y 200 euros, sin contar con el billete de 500 que el BCE eliminó del mercado en mayo de 2016.
La nueva serie incluye nuevos elementos de seguridad que ofrecen principalmente una mayor protección contra la falsificación. Además, todas estas novedades se incorporan bajo el sistema “toque, gire y mire” que simplemente mediante el sentido de la vista y tacto se permite comprobar la autenticidad del dinero.
Los nuevos billetes también incorporan un tamaño mucho mayor en los números para poder ser perfectamente identificados por las personas con poca visibilidad. También disponen de una mayor durabilidad en su material, lo que significa que tendrán que sustituirse con menos frecuencia reduciéndose con ello el impacto y el coste medioambiental.
No obstante, la llegada de los nuevos billetes de 50 euros no eliminará del mercado las denominaciones de la primera serie que seguirán manteniéndose hasta que se agoten, circulando ambas en paralelo como indico el BCE.
Novedades del billete
El nuevo diseño sigue manteniendo los colores predominantes, verde y amarillo, al igual que los motivos más representativos del modelo como la ventana y el puente. Como nuevas incorporaciones, presenta una ventana transparente con un holograma con el retrato de Europa, la diosa de la mitología griega que ya se incorporó en los otros nuevos diseños de billetes y que también estará presente en una nueva marca de agua en un lateral.
Así mismo, se ha incorporado los nuevos países pertenecientes a la Unión Europea desde 2002, como Malta y Chipre. Al igual que se ha añadido la palabra ‘euro’ escrita en el alfabeto cirílico, además del latino y el griego. Por otro lado, la sigla del BCE figurará en diez variantes lingüísticas en vez de en las cinco anteriores.
Por último, otra de las novedades es un tacto en papel más resistente con una textura más firme que irá acompañado de líneas más cortas en el relieve y un número de color verde esmeralda, que cambia al azul oscuro y produce un brillo metálico, que se desplazará verticalmente al deslizarlo.
Isabel Jaén Sánchez