El 2004, el órgano ejecutivo de la Unión Europea llevó a cabo una investigación a Facebook para averiguar si la compra de WhatsApp había conllevado una vulneración del libre mercado, y la empresa norteamericana facilitó información engañosa, al ocultar en dos ocasiones, la posibilidad de vincular las cuentas de los usuarios de ambos servicios.
«La decisión adoptada envía a las empresas una clara señal de que deben cumplir todos los aspectos de las normas sobre concentraciones de la UE, incluida la obligación de proporcionar una información correcta. Además, impone una multa proporcional y disuasoria a Facebook. La Comisión debe poder tomar decisiones sobre los efectos de «las concentraciones en la competencia con pleno conocimiento de los hechos exactos», ha señalado la comisaria europea de Competencia en un comunicado, Margrethe Vestager.
La Comisión Europea autorizó la adquisición de la applicación móvil por 13.800 millones de euros, la cual no queda revertida por la multa impuesta este jueves.
La multa que ha recibido Facebook ha sido la primera sanción de este tipo que ha impuesto la UE, que desde 2004 puede penalizar a las compañías que ofrezcan información incorrecta, con hasta un 1% de sus ingresos anuales.
La cantidad de la sanción podía haber ascendido a 250 millones, pero el hecho de haber reconocido la infracción de las reglas y facilitar el procedimiento le ha servido a Facebook para obtener una rebaja en la multa.
Marta de la Fuente