Los soldados de Francia se han convertido en los últimos años en los objetivos de los ataques terroristas. En esta ocasión, un vehículo ha arrollado este miércoles a una patrulla militar del dispositivo antiterrorista francés, Sentinelle, en la localidad Levallois Perret, París. El atropello ha causado seis heridos, de los cuales dos están graves, aunque no se teme por la vida de ninguno de ellos. La fiscalía antiterrorista ha abierto una investigación sobre el suceso y actualmente centra todos sus esfuerzos en localizar al conductor del coche que se ha dado a la fuga, según ha confirmado el Ministerio de Defensa.
Los hechos se han producido a partir de las 8.15 de la mañana en la periferia del oeste de París cuando los soldados abandonaban el cuartel de la plaza de Verdum en Levallois-Perret. El conductor esperaba en el interior del vehículo a que salieran los soldados a empezar las patrullas y acelerar entonces «de forma fuerte», en dirección prohibida, para arremeter contra éstos.
La Prefectura de la policía ha informado que se ha abierto una investigación en la que se busca de manera activa al conductor del vehículo que conducía un BMW y que se dio a la fuga tras el atropello. En estos momentos, las autoridades se apoyan en las numerosas cámaras de vigilancia distribuidas por la localidad parisina.
La fiscalía antiterrorista de París investiga el hecho como «una tentativa de asesinato de personas depositarias de la autoridad pública en relación con un acto terrorista». En este sentido, el alcalde de la localidad parisina, Patrick Balkany, ha asegurado que «sin duda» se trata de un «acto deliberado». Aun así, las autoridades se muestran cautelosas en cuanto al motivo del ataque.
La sección antiterrorista de la fiscalía de París investiga bajo la premisa de una «tentativa de asesinato de personas depositarias de la autoridad pública en relación con un acto terrorista», informa la agencia France Presse.
Los militares, que pertenecen al 35 Regimiento de Infantería, fueron inmediatamente hospitalizados, en el caso de los dos de más gravedad en el centro militar Percy, en la cercana localidad de Clamart.
La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, ha ofrecido «todo su apoyo» a los heridos y ha añadido que «espera con todo su corazón que el atacante sea detenido lo más rápido posible».
First images from the scene of the attack in Paris pic.twitter.com/RUqsW88Ztj
— Jenni Missye White (@Missycilious) 9 de agosto de 2017
El ataque se ha producido sólo cuatro días después de que un joven de 18 años intentar acceder al interior de la Torre Eiffel con un cuchillo al grito de «Alá es grande». De hecho, en los últimos dos años, Francia se ha convertido en el principal escenario de los atentados yihadistas que en total han dejado a más de 239 fallecidos.
Los soldados pertenecían a la operación Sentinelle que comenzó en enero de 2015, tras el primer ataque yihadista que vivió Francia con el atentado a la revista Charlie Hebdo. En total, 7.000 militares fueron asignados a esta misión y desde entonces policía y soldados se han convertido en el objetivo de los grupos terroristas: Niza en febrero de 2015, Valence en enero de 2016, en el museo del Louvre en febrero de 2017, Orly en marzo de 2017 y en la Torre Eiffel hace cuatro días.
Andrea Morea