«Las tetas son para que las chicas se ven atractivas». Usborne, editorial inglesa de libros para adolescentes, pide perdón y anuncia que cambiará la frase en la reimpresión del libro. Cuatro años ha tardado la editorial en darse cuenta de que la frase es sexista.
Usborne publicó en el año 2013 “Growing Up for Boys», del escritor Alex Frith. Salió al mercado bajo la descripción: “Es un libro franco y amistoso que ofrece a los chicos consejos sobre qué esperar de la pubertad y cómo mantenerse felices y confiados a medida que pasan por cambios físicos, psicológicos y emocionales”. Según el editor, el libro recoge una variedad de temas, incluyendo los estados de ánimo y los sentimientos. También trata el tema de las chicas, la dieta, el ejercicio, el sexo, la confianza en sí mismo, el alcohol y las drogas.
Es la sección del libro que retrata el tema de los pechos la que ha traído la crítica. En el extracto poco acertado que escribió Alex Frith expone que “las niñas tienen senos por dos razones: uno es hacer la leche para los bebés y la otra es hacer que la chica se vea mayor y atractiva.»
Después de una campaña que originó y dirigió el grupo de padres ‘Let Books Be Books’ hace tres años, la editorial encargada de lanzar al mercado el libro de Frith anunció que interrumpiría la continuación de la publicación de títulos de género, así como su ‘Pink Girls’ Activity Book’ y ‘Blue Boy Activity Book’.
La crítica del libro ‘Growing Up for Boys’ se extendió hasta redes sociales como Twitter, y luego continuó hacia la compañía estadounidense, Amazon. Y fueron los revisores de esta compañía quienes describieron el libro como «sexista». Twitter ha recogido numerosas críticas, así como de padres y profesores, donde se muestran sentimientos de desaprobación. Muchos de los usuarios comparten la misma opinión, evidenciando así que el gran problema es la falsa equivalencia de los pechos desarrollados con el atractivo y con el ser “adulto”.
La compañía ‘Let Books Be Books’ continúa luchando contra el sexismo en los libros infantiles y ya ha resultado tener una respuesta crítica ante este tipo de publicaciones. “Es inquietante ver este tipo de sexismo en un libro dirigido a los niños `pubescentes. Sugiere que los cuerpos de las muchachas son para que los chicos miren, que no es el tipo de mensaje que esperaríamos que los editores de los libros de los niños deseen enviar” comentó Trisha Lowther, miembro del grupo.
“Si queremos animar a nuestros hijos a tener relaciones saludables entre sí y si queremos construir una cultura de consentimiento, sugerir partes del cuerpo existen únicamente para su uso por otra persona. Este es el lenguaje mal pensado e irresponsable que se utiliza en lo que se pretende ver como un libro educativo”, esta es la respuesta de Fen Coles, co-director de ‘Letterbox Library’ y especializado en libros infantiles, sorprendido al percatarse del problemático contenido que se escondía en una de las páginas del criticado libro.
Paula Faraldo