El Global Risks Report 2018 se publica con intención de afrontar los desafíos sistémicos a los que se enfrenta el mundo. El informe de este año abarca los efectos de la degradación ambiental, las violaciones de seguridad cibernética, las tensiones económicas y las tensiones geopolíticas. Y en una nueva serie llamada «Future Shocks», el informe advierte contra la complacencia y destaca la necesidad de prepararse para las interrupciones repentinas y dramáticas.
El informe de 2018 presenta los resultados de nuestra última Encuesta mundial de percepción de riesgos, en la que cerca de 1.000 expertos y responsables de la toma de decisiones evalúan la probabilidad y el impacto de 30 riesgos globales en un horizonte de 10 años.
En este período de medio plazo, predominan los riesgos ambientales y cibernéticos. Sin embargo, la encuesta también destaca los elevados niveles de preocupación sobre las trayectorias de riesgo en 2018, particularmente en relación con las tensiones geopolíticas.
El Global Risk Report presentado en Davos muestra los 5 riesgos que tendrán mayor impacto en los próximos 10 años: las armas de destrucción masiva, los fenómenos meteorológicos extremos, los desastres naturales, el fracaso en la contención del cambio climático o en la adaptación a éste y la crisis del agua.
Una de las prospectivas más sorprendentes es la extinción del pescado por el uso de barcos-drone
Pero además, hay otra evaluación de los 10 mayores riesgos mundiales, “no en la forma de predicción sino como elementos para la reflexión”, se señala con objeto de no austar al personal.
Se plantea el problema de la suficiencia de alimentos en el mundo, como consecuencia del cambio climático y los desastres citados, lo que producirá carestías, guerra económica y finalmente conflictos violentos.
Otro peligro es una hipertrofia de la inteligencia artificial, que iría mucho más allá de la consecuencia conocida de pérdida de puestos de trabajo. Según esta hipótesis, algoritmos fuera de control podrían provocar el caos en internet, con un impacto mundial inimaginable.
Por supuesto ni el presidiente norteamericano ni el populismo podrían quedar al margen de los riesgos globales. Trump, el Brexit y el proteccionismo pueden acabar con las normas multilaterales y derivar en disputas sobre el comercio que perjudicarán a todo el mundo –afirman- en sus actividades económicas.
Los analistas perciben una perspectiva de deterioro democrático a causa del auge del populismo y autoritarismo que derivará en violencia y guerra.
Se lo habíamos apuntado en Estrella Digital más de una vez, y los analistas de Davos lo confirman: el pescado se va a extinguir. El temor es creciente, pero a la ya evidente sobreexplotación de los mares, las `rácticas pesqueras masivas se suma , ahora la amenaza de barcos-drones, algo ya extendido en la pesca deportiva.
No niegan los expertos en prospectiva la posibilidad de otra crisis financiera ni, menos aún, el aumento creciente de las desigualdades. Esta evidencia ocupa un lugar bastante bajo en la tabla, a pesar de su relación las grandes crisis de refugiados y migrantes.
La llamada “guerra sin reglas” es el peligro del s.XXI, señalan los expertos: los ciberataques a gran escala como parte muy determinante y decisiva en un enfrentamiento bélico.
No falta una referencia literal que la “identidad nacional y autodeterminación nos está llevando a la violencia y la inestabilidad constitucional”,-
Davos tiene una solución a esta crisis identitaria: “Una fuerte promoción y protección de los derechos culturales y políticos dentro de los estados”… Resulta llamativo que la oficina de prensa del Foro ilustra el asunto con una foto de una manifestación en Catalunya (aunque no independentista sino española).
Se anuncia una ruptura o desplome total de internet como consecuencia de ciberataques.
En definitiva, los informes vienen a destacar crisis en la relación entre tecnología, desarrollo y medio ambiente, y relativizan los problemas sociales.
Miguel de la Balsa