En un mitin celebrado en el polideportivo de Pumarín de la capital asturiana, Borrell ha señalado que Europea «tiene que cambiar para sobrevivir y hacerse más democrática» dado que ya no hay frontera «entre lo macroeconómico», de lo que hasta ahora se ocupaba, y «lo social», que quedaba en manos de los Estados.
La evolución en ese sentido de las instituciones requiere, ha subrayado, de una elevada participación ciudadana en los comicios del próximos domingo que si los partidos «eurófobos» consiguen alcanzar un tercio del Parlamento Europeo bloquearán su funcionamiento y el de una Comisión Europea que, ha recordado, lleva ya quince años en manos de los conservadores.
El ministro de Asuntos Exteriores, que en presencia de los expresidentes del Principado Pedro de Silva y Juan Luis Rodríguez-Vigil ha tenido un recuerdo para el fallecido Vicente Álvarez Areces, ha alertado del riesgo de que la sociedad española esté «cansada de elecciones» y que ahora baje la participación «una vez que se ha conseguido evitar la España de la pandereta».
Frente a ella, ha apuntado, el PSOE representa «la España del cincel y de la idea, la España tolerante y la identidad profunda de un pueblo que viene de lejos en la historia y no que quiere que se la falsifiquen».
Así, ha indicado, en estas elecciones europeas está en juego «mucho más que en las anteriores» al haber surgido fuerzas «muy poderosas» que no quieren seguir construyendo Europa «sino echar marcha atrás en un proceso que constituye la obra mas hermosa que los hombres han hecho a lo largo de su historia».
Tras recordar que en los últimos comicios europeos la participación fue del 47 por ciento, Borrell se ha dirigido a los jóvenes -de los que sólo uno de cada cuatro votó en 2014- para advertirles de que no pueden pensar que Europa «se hace sola» después de que el proceso para su construcción se hiciera sobre la base de hacer «una paz irreversible» tras siglos de guerras.
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