La Comisión Nacional de Honestidad y Justicia del partido político mexicano Morena sancionó a Alejandro Rojas Diaz—Duran como consecuencia a sus críticas a Yeidckol Polevnsky, presidenta de dicho partido. La Comisión lo suspendió sus derechos partidarios por tres años y lo destituyó como consejero del partido. Esto implica que no podrá ser postulado por Morena en casos de elecciones internas o candidaturas a cargos de elección popular.
Hay que recordar que el pasado 14 de mayo, Díaz-Durán pidió a Polevnsky renunciar la presidencia de Morena, para que compitiera por dicho cargo en igualdad de condiciones, pues de lo contrario Yeidckol: “sería juez y parte” en las elecciones internas del partido.
Además señaló que:“Cualquier miembro dirigente que tenga aspiraciones a la presidencia nacional de Morena debe renunciar al cargo que ostenta, porque están utilizando recursos públicos para su promoción personal y tiene el control del aparato administrativo y de las dirigencias estatales”, dijo.
Sobre la sanción, Diaz—Duran emitió un comunicado a través de redes sociales en el que defiende su inocencia de las faltas por las que lo acusan, por lo que impugnará la sanción ante el poder judicial.
“De conformidad con el principio de presunción de inocencia estipulado tanto en nuestra Constitución política de los Estados Unidos Mexicanos, como en el Pacto de San José, soy inocente hasta que se demuestre lo contrario.
Voy a impugnar esta ilegal determinación ante los órganos internos de MORENA, en los Tribunales locales y federales, y si fuera el caso, hasta en los tribunales internacionales,
Dicha resolución viola mi derecho de libre expresión, estipulada en el artículo 8o. constitucional, ya que es criterio del Tribunal Federal Electoral la libre expresión de las ideas y la crítica dentro de los institutos políticos, siempre que no atente en contra de sus principios, cuestión que nunca ha acontecido, toda vez que todas mi declaraciones han sido una relación de hechos que ya eran públicos..” señaló en el comunicado.
Finalmente destacó que la dirigencia nacional de Morena quiere imponer una ley mordaza a los militantes de Morena, lo cual es propio de una dictadura, situación que ni militantes ni simpatizantes aprueban.
Giovanni Hernandez