Juan Guaidó, presidente encargado de Venezuela, recalcó que las personas encargadas de los fondos destinados a los militares que desertaron del régimen de Nicolás Maduro fueron separadas de su cargo y se encuentran en proceso de investigación por la Fiscalía colombiana.
El 23 de febrero pasado, más de 900 militares cruzaron la frontera para huir del régimen y ponerse a la orden de Guaidó y su causa. Ellos, más sus familiares, suman un total de 1.600 personas atendidas. En un acuerdo con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados y Colombia, decidieron regularizar el estatus migratorio de estos venezolanos. En una nota publicada por el portal digital Panam Post se asegura que los encargados designados por Guaidó, Kevin Rojas y Rosana Barrera, desviaron los fondos destinados para los militrares, un total de 90.000 dólares. Ante la acusación, el presidente de la Asamblea Nacional pidió una investigación de las autoridades de Colombia, antes de las primeras 24 horas de la incriminación. Guaidó pide a Colombia investigar presunta corrupción de sus representantes
«Son 2 activistas y estaban en ese momento perseguidos. Forman parte del equipo operativo del estado Táchira. Su función era atender a una cantidad de entre 104 y 140 militares, cooperar con ellos en su atención: hospedaje y comida», dijo Guaidó en una entrevista para ABC.
Los encargados del dinero fueron retirados de sus cargos, fue pedida una investigación a la Fiscalía de Colombia, a la AN de Venezuela y una auditoría de la organización Transparencia Venezuela.
El monto por el que se les acusa de desvío de fondos representa la totalidad de los recursos para los militares, dinero que fue donado por personas particulares para ayudar a la causa que preside Guaidó.
El presidente del Parlamento fue interrogado por lo sucedido el 30 de abril, a lo que él respondió que venía advirtiendo la importancia de negociar con la Fuerza Armada, funcionarios y militares para sacar a Maduro del poder. «Lo que pasó fue un reflejo de todos esos ingredientes: de Fuerzas Armadas descontentas, de la decisión de Christopher Figuera (responsable del Servicio de Inteligencia Bolivariana), de la gente que salió a respaldar en las calles esa iniciativa de los militares, de funcionarios que quieren ponerse del lado de la Constitución y del cese de la usurpación», aseguró.Según información del periódico El Nacional
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