Al iniciar el ciclo escolar 2019-2020 en todas las escuelas, centros y unidades del IPN, detalló que el nuevo edificio albergará salas de seminarios, salones y laboratorios, que beneficiarán a una comunidad de cinco mil 100 estudiantes de licenciatura y posgrado, 800 académicos y 250 trabajadores de apoyo y asistencia a la educación.
Rodríguez Casas enfatizó que hoy se hace realidad algo que se planeó desde hace dos años cuando fungió como director de esa escuela. «Este va a ser un edificio funcional y seguro; el compromiso es que en agosto del próximo año esté totalmente terminado», acotó.
El director del IPN subrayó la necesidad de ofrecer nuevos espacios a los estudiantes para no tener aulas provisionales como las que tiene esta escuela el día de hoy y sobre todo para incrementar la matrícula en esta unidad optimizando los espacios.
La conclusión del edificio, cuya cimentación y estructura se edificó desde 2013, se efectuará con recursos provenientes del Fondo de Investigación del IPN.
Al tiempo que se realiza la construcción de ese nuevo espacio académico, se contemplarán las necesidades para la instalación del mobiliario, equipamiento y laboratorios, explicó.
El edificio tendrá una superficie de ocho mil 50 metros cuadrados, que tendrá 30 aulas académicas para impartición de cátedra, seis laboratorios, cinco salas de seminarios, seis módulos de baños, zona lúdica y de convivencia, además de estacionamiento para 40 vehículos.
Con un sistema constructivo de bajo impacto amigable con el medio ambiente que implica la utilización de materiales innovadores, se reducirá el peso del inmueble en 330 toneladas.
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