Evo Morales, ex presidente de Bolivia, afirmó este viernes que la única salida para la crisis y para pacificar Bolivia es celebrar una reunión nacional con todos los actores políticos, con o sin mediación internacional.
“La mejor forma de pacificar en este momento es una reunión en la que esté el opositor Luis Fernando Camacho, Carlos Mesa, Evo, los movimientos sociales y el gobierno de facto”, señaló Morales en entrevista con la cadena CNN en español.
En la entrevista, Morales afirmó que desde su llegada a México ha planteado esta reunión nacional, pues está convencido de que es la única manera de que el pueblo pare.
Morales aseguró que el movimiento de protesta que se ha observado estos días en su país será hasta acabar con lo que considera un golpe de Estado.
Agregó que este diálogo sería mucho mejor con mediación internacional.
Sobre este aspecto, informó que recibió la visita -en Ciudad de México- del ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Rodolfo Nin Novoa. Este le preguntó de qué manera pueden contribuir a la solución de la crisis en Bolivia.
El ex mandatario lamentó las muertes durante las protestas en la zona de Cochabamba, ocho víctimas fatales y más de 100 heridos.
También lamentó la represión y dijo que autoridades de facto en el país son responsables.
Morales descalificó al opositor Camacho y lo acusó de utilizar la Biblia para dañar y herir a la familia. Lo señaló como representante de un racismo y falangismo que actúa al estilo de Pablo Escobar al hacer listas para matar.
Rechazó las acusaciones de la presidenta interina Jeanine Áñez, quien dijo que si él regresa a Bolivia, deberá responder a la justicia. Afirmó que el ex presidente cometió un delito electoral y de corrupción.
“Jamás cometí delito”, aseguró Morales.