El jefe de la Unidad Contraterrorista de Scotland Yard, Neil Basu, confirmó que se trató de un incidente terrorista y que el atacante, que portaba un falso cinturón de explosivos, murió en la escena por los disparos de los agentes policiacos.
En conferencia de prensa, Basi declaró que un «cordón de seguridad permanecerá en el lugar» durante un tiempo considerable y anunció que la unidad antiterrorista del cuerpo está encargándose de la investigación del suceso.
El alcalde de Londres, Sadiq Khan, también señaló que el incidente está siendo investigado como un posible ataque terrorista y por ahora la policía no está buscando a otros sospechosos, mientras sobre las víctimas, dijo que hay algunos ciudadanos seriamente heridos.
«Permaneceremos determinados a plantar cara al terror con firmeza y unidad. Los que pretenden atentar contra nosotros y dividirnos nunca lo conseguirán».
En una comparecencia a las afueras del cuartel general de la Policía Metropolitana de Londres, Khan indicó que el ataque en el Puente de Londres «parece ser un incidente aislado».
Destacó la valentía de varios ciudadanos que se abalanzaron sobre el hombre para que dejara de apuñar a las personas que transitaban por el Puente de Londres y que hayan retenido al agresor hasta la llegada de la policía, además agradeció el trabajo de los agentes y servicios de emergencia.
El primer ministro británico, Boris Johnson, quien se encontraba haciendo campaña para las elecciones del 12 de diciembre, regresó de inmediato a Downing Street para hacerse cargo de la situación y calificó como un «ataque terrorista» el incidente.
Según el diario The Guardian y la cadena británica Sky News, cinco personas resultaron heridas, algunas de gravedad, tras ser apuñaladas en el Puente de Londres (London Bridge), que cruza el río Támeses, el cual permanece cerrado al tráfico, al igual que la parada del metro del mismo nombre.
En junio de 2017, el Puente de Londres fue escenario de otro ataque cuando tres extremistas a bordo de una camioneta, arremetieron contra los peatones, matando a ocho personas e hiriendo a otras 48.