Los equipos de rescate mantienen las labores de búsqueda, prácticamente se da por descartado que queden más cuerpos entre los escombros, lo que elevaría la cifra final de fallecidos a ocho personas.
La explosión tuvo lugar esta madrugada, y las primeras hipótesis apuntan a que podría haber sido causada por una fuga en la tubería del gas provocada por una reforma en la casa, de tres plantas y donde residían los fallecidos.
El edificio ha quedado reducido a escombros, y las labores de rescate se han visto dificultadas por las bajas temperaturas y el humo.
La compañía que suministra gas en la zona decidió cortar el servicio tras la explosión, lo que ha dejado a decenas de hogares sin combustible durante toda la noche, en una región montañosa donde las temperaturas son inferiores a los cero grados.
La población de Szczyrk, en la Silesia polaca, es un conocido centro de esquí en Polonia.
Tanto desde la Presidencia como desde el Gobierno polaco se han trasladado a los allegados las condolencias por la tragedia.