Estuvieron a favor de declarar fundada la demanda la presidenta Marianella Ledesma, Ernesto Blume y Eloy Espinoza Saldaña. En contra, Carlos Ramos, José Luis Sardón, Augusto Ferrero Costa y Manuel Miranda.
Los magistrados decidieron votar por separado para resolver la constitucionalidad de las tres prácticas en debate. La primera en votarse fue la corrida de toros, luego la pelea de toros y finalmente la pelea de gallos.
Algunos de los argumentos de los jueces para votar en contra de la demanda era mantener una práctica cultural que llevaba varios años practicándose.
“Todos deseamos que toda forma de maltrato animal desparezca, pero también es cierto que ciertas prácticas culturales de gran arraigo no pueden eliminarse súbitamente, más aún cuando tiene un arraigo extendido geográficamente, como las corridas de toros y peleas de gallos”, manifestó Carlos Ramos.
Una posición distinta tuvo la presidente del TC, Marianella Ledesma, quien explicó que el derecho proscribe la violencia, incuso si son animales, por ende, los poderes públicos deberían d prohibir cualquier tipo de manifestación de maltrato.
Ledesma dijo que la decisión debió haber tenido una “mirada más ecocéntrica” y no “antropocéntrica”. “Es una oportunidad para que el Tribunal Constitucional de una nueva mirada a los animales y se vea cuán útiles pueden ser para nosotros”, aseguró.
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