El cierre fronteras rige desde primera hora de esta jornada en los principales pasos internacionales que comunican al país con Perú, Chile, Brasil, Paraguay y Argentina, con la tolerancia para quienes hacen comercio y los residentes en Bolivia que están de regreso.
Una medida de restricción similar es la que regirá para los vuelos internacionales desde este sábado, que quedarán suspendidos, de acuerdo a lo que establece el decreto de cuarentena que el Gobierno transitorio del país emitió el pasado martes.
En la víspera, el ministro interino de Defensa, Luis Fernando López, desarrolló una inspección “a los principales puestos fronterizos” de Pando, Beni, Santa Cruz y Tarija, en las regiones norte, oriental y sureña de Bolivia, para “controlar el ingreso del coronavirus”, según un comunicado de su cartera.
López reprendió a personal de la frontera de Bolivia con Brasil en Puerto Quijarro, al considerar que eran demasiado permisivos en el ingreso al país, según mostraron televisiones bolivianas.
La prioridad es evitar el ingreso de personas de nacionalidad china, coreana, iraní y procedentes del espacio europeo Schengen, aseguró López, citado en la nota.
El resguardo de las fronteras de Bolivia a cargo de las Fuerzas Armadas, conjuntamente con la Policía Boliviana y las autoridades de Migración, se efectuará “las 24 horas del día” hasta que se cumpla el plazo fijado por la cuarentena del 31 de marzo.
También desde este sábado están prohibidos los servicios de transporte “terrestre, fluvial y lacustre de pasajeros” tanto a nivel regional como internacional, que se dan a través del lago Titicaca con Perú y los cauces de ríos, principalmente con Brasil.
Una determinación algo más tolerante es la que se aplica desde el pasado miércoles a los vuelos locales, que tienen un horario fijo para operar, de 05:00 hasta las 16:00 hora local (09:00 a 20:00 GMT), teniendo en cuenta que se ha instruido a la población estar en casa a partir de las 17:00.
El país se encuentra en emergencia nacional, lo que permite destinar recursos extraordinarios del Estado.
Bolivia tiene 16 casos confirmados, varios importados de Europa, y el Gobierno interino del país no descarta “medidas de más impacto si la situación amerita”, ante la “alta probabilidad” de una transmisión “comunitaria” de la enfermedad, según el último parte del ministro transitorio de Salud, Aníbal Cruz.
Las autoridades bolivianas también refirieron que en El Alto, la segunda mayor ciudad boliviana, existen dificultades para que la población acate las disposiciones de prevención contra el COVID-19.
Un video en redes sociales mostraba cómo un grupo desafiaba a la Policía y se negaba a regresar a sus casas bajo el argumento de que su alimentación, basada en papa deshidratada o chuño, los hacía inmunes al coronavirus
Estrella Digital