Tras un Consejo de Ministros extraordinario, el primer ministro luso, António Costa, se mostró favorable a continuar con las medidas de aislamiento social y manifestó que el buen comportamiento de los portugueses está favoreciendo un crecimiento más moderado de los contagios.
Aún así, pidió «máxima intensidad y autodisciplina» para las próximas semanas, especialmente en las vacaciones de Pascua.
Costa señaló que el próximo día 9 se decidirá cómo avanzará el actual curso escolar y adelantó que el Gobierno estudia también medidas para frenar la expansión del virus en las cárceles, entre ellas «un conjunto de indultos por razones humanitarias».
La renovación del estado de emergencia debe ser debatida en la Asamblea lusa y decretada por el presidente, Marcelo Rebelo de Sousa.
Hasta hoy, Portugal ha registrado 187 muertos y 8.251 contagiados por coronavirus, más de la mitad en el norte del país
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