Un contingente humano salió a las calles de la ciudad de Paracas en la región Ica para rechazar la presencia de 300 personas que llegaron de Lima para trabajar en dos empresas privadas, por temor a que sean portadores del nuevo coronavirus.
Los pobladores no permitieron la entrada de vehículos particulares que trasladaban a los trabajadores hacia sus hoteles y se cercioraron que regresen por la misma carretera por la que vinieron.
Luego se dirigieron hacia los exteriores del Hotel Aranwa, donde estaba alojado otro grupo de trabajadores de Lima para exigir que los retiren. La Policía acudió al lugar para prevenir desmanes.
Los presentes en la manifestación alegaban que en Paracas no hay registro de casos de COVID-19, por lo que no desean que ingresen personas provenientes de zonas con alta probabilidad de contagio.
“Que se vayan todos los señores que se encuentran dentro (del hotel) que vienen desde Lima. Paracas es una zona limpia. Nosotros hemos aguantado 40 días para que haya contagios y que venga alguien e infecte a todos, no es justo. Queremos que salgan ahora mismo”, dijo uno de ellos a América Noticias.
Al lugar llegaron las autoridades locales y tras conversar con los encargados del hotel, los trabajadores fueron retirados en un bus con dirección a Lima.
Una representante de la municipalidad indicó al citado medio que se comprobó que los trabajadores llegaron a Paracas en un bus sin respetar el aforo máximo que garantice el distanciamiento social.
Tampoco contaban con el certificado de descarte de coronavirus ni contaban con las medidas sanitarias preventivas, poniendo el riesgo a la población de la ciudad.
El hotel se defendió indicando que no hay ninguna disposición gubernamental que los obligue a cumplir con lo anterior mencionado.
Tras retirar a los trabajadores, la municipalidad de Paracas clausuró el Hotel Aranwa debido a que incumplían con las normas de seguridad de Defensa Civil
Estrella Digital