El multimillonario Robert Durst, del que HBO realizó un documental sobre los crímenes acaecidos a su alrededor, titulado The Jinx, ha sido condenado por matar a su mejor amiga Susan Berman.
Durst fue declarado culpable de matarla en el año 2000, para que no hablara con la policía sobre la desaparición de su esposa.
A ella que acababa de cumplir os 55 años, la encontraron con un disparo en la cabeza en su casa de Beverly Hills.
En la parte final del documental de The Jinx, se escucha a Durst murmurar para sí mismo: «¿Qué diablos hice? Los maté a todos, por supuesto».
Horas antes de que saliera al aire el último episodio, las autoridades arrestaron a Durst en Nueva Orleans por el asesinato de Berman . Los miembros del jurado vieron el clip durante el juicio.
Los fiscales llamaron a Durst, de 78 años, un «psicópata narcisista». Ahora parece probable que muera en la cárcel.
Susan Berman era una escritora de crímenes y había actuado como portavoz de Durst cuando se convirtió en sospechoso de la desaparición de su esposa.
En una audiencia anterior, el abogado de Durst, Dick DeGuerin, se opuso a que los miembros del jurado también vieran los videos de All the Good Things, una película de 2010 sobre su matrimonio protagonizada por Ryan Gosling y Kirsten Dunst.
La película fue dirigida por el cineasta Andrew Jarecki de The Jinx y describe la vida del magnate, mostrándolo como un asesino.La esposa de Durst, Kathleen McCormack, estudiante de medicina, desapareció en 1982 y se presume que murió.
Poco después del veredicto del viernes, su familia emitió un comunicado instando a los fiscales del condado de Westchester de Nueva York a procesar a Durst.
«El sistema de justicia en Los Ángeles finalmente ha servido a la familia Berman. Ahora es el momento de que Westchester haga lo mismo por la familia McCormack», dijeron.
Los fiscales argumentan que Durst en realidad asesinó a tres personas; la tercera era un vecino anciano, Morris Black, quien descubrió la identidad de Durst en 2001 mientras se escondía en Texas.
Durst fue absuelto de asesinar al señor Black, argumentando con éxito que lo había matado por motivos de defensa propia antes de cortarlo en trozos su cuerpo.
Durst es un heredero de una de las dinastías inmobiliarias más ricas y poderosas de Nueva York. Su hermano Douglas Durst, quien testificó en el juicio, dijo al tribunal: «Le gustaría asesinarme».
Está previsto que Durst sea condenado el 18 de octubre.
Pilar Moreno