Cientos de ciudadanos rusos han sido detenidos en varias ciudades del país, en protesta por la movilización parcial de Putin para llevar a los reservistas al frente de Ucrania.
La asociación pro derechos humanos OVD-Info calculó que más de 1.300 personas fueron arrestadas en numerosas poblaciones como San Petersburgo, Moscú, Ekaterimburgo, Irkutsk así como en la remota Siberia.
La oficina del fiscal de Moscú advirtió el miércoles que las movilizaciones a través de Internet para unirse a las manifestaciones no autorizadas, o la participación en ellas, podrían acarrear hasta 15 años de cárcel.
Podrían ser procesados en virtud de leyes contra el descrédito de las fuerzas armadas, la difusión de «noticias falsas» sobre la operación militar de Rusia en Ucrania o alentar a los menores a protestar.
Las duras sanciones de Rusia por difundir «desinformación» sobre la guerra de Ucrania y el acoso policial a los activistas anti-Putin han hecho que las protestas públicas contra la guerra sean muy esporádicas.
«Vida para nuestros hijos» – exclaman los rusos en Moscú. pic.twitter.com/XzxG1pifXA
— Inna Kovalska (@KovalskaInna) September 21, 2022
Pero el grupo de oposición contra la guerra Vesna impulsó concentraciones generalizadas y en Telegram denunció numerosos arrestos en toda Rusia. Un video difundido por las redes sociales, mostraba como la policía introducía violentamente a los manifestantes en un autobús en Ekaterimburgo
Vesna llamó a la «no mogilización«, un juego de palabras, porque «mogila» en ruso significa tumba.
Pavel Chikov, abogado del grupo ruso de derechos humanos Agora, declaró que Agora había recibido 6.000 consultas, desde el anuncio de Putin, de rusos que querían información sobre los derechos de los soldados, antes de tener que ser llamados a filas.
Ante el nuevo decreto del Kremlin, los vuelos a países como Armenia o Turquía se agotaron en horas para los próximos días. Además se formaron hasta 35 kilómetros de retenciones para intentar salir por la frontera con Finlandia.
El control del Kremlin sobre los medios estatales ha permitido que muchos rusos apoyen su afirmación de que el gobierno «neonazi» de Ucrania y la OTAN amenazan a la patria y que los rusos étnicos en Ucrania deben ser defendidos.
R.F.