Rusia podría estar planeando un ataque masivo en la región ucraniana de Jersón. Así alerta el presidente Volodimir Zelenski, que ha concretado que los planes rusos pasarían por volar tanto la central hidroeléctrica como la presa de Kajovka, lo que causaría, en sólo unas horas, la inundación de Jersón y de otras 80 ciudades ucranianas, además de afectar a la central nuclear de Zaporiyia. Ucrania cree que Rusia podría haber colocado minas en la presa de Kajovka, y Zelenski considera que un ataque de esas características equivale al uso de armas de destrucción masiva debido al número de víctimas que causaría.
El embalse de Kajovka, objetivo ruso según Ucrania, tiene una longitud de más de 230 kilómetros, y cuenta con una superficie de 2.155 kilómetros cuadrados. Entre las funciones de la presa no sólo está la regulación del paso de agua, sino que también se encarga de refrigerar los reactores de la central nuclear de Zaporiyia, otro de los puntos atacados por Rusia, y que añade el riesgo de accidente nuclear a este ataque.
…pero Rusia acusa a Ucrania
Sin embargo, Kiril Stremoúsov, vicegobernador prorruso de esta región ucraniana (que a principios de este mes fue anexionada por Rusia), dijo este martes de que Ucrania estaría preparando “un ataque masivo en la planta hidroeléctrica de Kajovka”. Por ello, se ordenó la evacuación de más de 60.000 civiles en la región y se prohibió la entrada a cualquier ciudadano. Por su parte, el gobernador prorruso en funciones Vladimir Saldo anunciaba “el traslado voluntario para los residentes en Beryslav, Bilozerka, Velyvka, Olejsandrivka y Snihurivka”. Todas estas poblaciones se sitúan en la orilla derecha del río Dniéper, cerca de la central hidráulica de Kakhovka.
Ucrania se tomó estas declaraciones como un paso atrás por parte de Rusia. No obstante, Zelenski considera ahora que los planes de Putin podrían pasar por este ataque, asolando 80 ciudades del sur de Ucrania, en el momento en que empieza el frío.