Esta es una película sobre la cual no tengo muy claro si su guión es absolutamente genial o si realmente se trata de una enorme torpeza.
No estoy hablando de la famosa película de Thomas Crown, un millonario ocioso en busca de aventuras protagonizado por Steve McQueen en la versión original y Pierce Brosnan en el reciente remake. Todo lo contrario. Esta es otra historia que trata sobre un señor que durante diez u once años fue alcalde de Parla. Como ustedes saben Parla es una populosa población que confunde sus límites con otras varias que forman el Gran Madrid.
Al protagonista de nuestra película y debido a sus éxitos electorales, sus compañeros madrileños le eligieron como Secretario General de su partido y candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, lo cual parece que no es del agrado de los mandamases del PSOE que prefieren que sea alguien más popular quién se enfrente a Esperanza Aguirre. Así que están barajando las posibilidades de presentar a alguien al que se le supone más conocido o conocida.
Estamos todos de acuerdo en que al señor Gómez, hasta la pasada semana, le faltaba mediáticamente un hervor. Bueno pues el tema está siendo tan bien o tan rematadamente mal gestionado que van a convertirle con espectacular rapidez en el político madrileño más popular. Y con un año por delante para seguir creciendo. Ya está en punto de cocción.
Con la que está cayendo, cualquier candidato socialista que se presente con el slogan: “Yo soy el candidato que Zapatero no quería”, tiene grandes posibilidades de hacerse con la Presidencia de cualquier Comunidad Autónoma y también puede presentarse a lo que quiera. Si además filtra que tampoco era el candidato ideal de Chaves y Blanco, la cosa ya trasciende de su Comunidad para adentrarse en lo nacional e incluso lo internacional. Si yo viviera en la calle Génova, estaría muy atento.
Tal vez en el gobierno debían darse cuenta de que ahora no están en situación de respaldar a nadie y que incluso hacerlo puede llegar a ser perjudicial. Ya vendrán tiempos mejores. O no.
En cualquier caso han descubierto la forma más práctica que tiene cualquier candidato socialista para escapar de un previsible voto de castigo al gobierno en las próximas elecciones municipales y autonómicas.
Así que creo que El caso de Tomás Gómez es una película con un final imprevisible.
Paco Fochs