El nuevo equipo de Deportes de la COPE andaba muy crecido. Subían en audiencia, subían en facturación y, como consecuencia de ello, la COPE los tenía puestos en un pedestal. Casi en una hornacina. Sus caprichos eran órdenes para los directivos y se empezaron a subir a la parra. Lógicamente, los más inexpertos no supieron controlar su euforia y pasaron al tremendismo. Especialmente Juan Antonio Alcalá que, noche tras noche, se tiraba cuesta abajo a toda mecha. Y la radio tremendista se puede hacer, únicamente, si se tienen muy amarradas las noticias. Es cierto que en el deporte, por lo general, vale casi todo pero sólo casi. Y una noche pillaron a Alcalá con el carrito del pescado.
El trece de marzo, en una de sus bajadas a toda pastilla en el programa “El Partido de las 12”, perdió los frenos y vinculó, sin pruebas y citando fuentes del Real Madrid, a los deportistas y médicos del Barcelona con prácticas de dopaje. ¡Bomba!
Al día siguiente se arrepintió pero ya no había quien parase la información. Y después pidió perdón. Pero lo suyo no era perdonable para el Barça. Incluso, Florentino Pérez, presidente del Real Madrid intercedió por él ante Sandro Rosell, el presidente del Barcelona. No había perdón. Dicen que el propio Presidente de la COPE viajó a Barcelona a arreglar el tema. Pero no consiguió nada. El Barça estaba ofendido y clamaba justicia.
Hoy, ha presentado una demanda contra la COPE por «intromisión ilegítima en el derecho al honor». «El FC Barcelona considera que estas informaciones han dañado la imagen, el prestigio y la reputación del club y constituyen una clara vulneración de un derecho constitucionalmente protegido» y reclama una indemnización de 6.190.090 euros.
Lo que le faltaba a la COPE. Las ganancias del equipo de Deportes por el aire. Adiós al Plan B.
Pero las preguntas, a 6.190.090 euros cada una, son: ¿Por qué la demanda es contra la COPE y no contra Alcalá? ¿Qué quiere negociar el Barcelona con la COPE porque esos seis millones de euros no son nada para el Barça y lo son todo para la COPE? ¿Y, por último, qué va a hacer la COPE con Alcalá?
Seguiré atento a la jugada para contarla aquí. De entrada, me dicen que a Alcalá se le han bajado los humos a menos 15.
Pinocchio