Francisco Fernández es el secretario general del PSOE de León, exalcalde de la ciudad leonesa y amigo personal del presidente Zapatero. Francisco Fernández, ahora, se presenta como número uno de la candidatura del PSOE al Congreso por la provincia preferida de ZP. Hasta aquí, todo normal. Y en la política española, más. A un político, cuando los ciudadanos le pegan una patada en el trasero en su ciudad, si está enchufado, sube hacia el Congreso. Total, en el Congreso se hace poco y allí todo vale… A muchos diputados les basta con votar cuando toca y poco más.
Pero lo peor es que don Francisco, como dicen en mi pueblo, se va a presentar en el Congreso con el riñón bien cubierto. Porque el tipo se ha prejubilado en el ERE de Caja España con 520.000 euros de nada. Caja España en la ruina pero él ha exigido sus derechos a prejubilarse y se lleva 520.000 euros a calentar el sillón de las Cortes. Para que nos enteremos todos, 520.000 euros son más de 80 millones de las antiguas pesetas. Y ello sin apenas pisar su despacho de vicepresidente en Caja España, cargo que ostentaba hasta la fusión con Caja Duero, puesto que estaba en régimen de excedencia por cargo público ya que era alcalde de León. Toma del frasco, Carrasco.
Y, lo peor aún, seguro que este pajarito va a hacer campaña electoral hablando de regeneración, austeridad y honradez.
Pero esto, señor Fernández, es indignante se ponga como se ponga. Esto es lo que no quieren esos indignados que tanto le gustan a su líder RbCb, o como se llame ahora. Esto no se puede consentir. Y esto es lo que hay que impedir legalmente. Porque, aunque sea legal lo que has hecho, ‘amiguete de ZP’, es inmoral. Y a la política española lo que le hace falta es lo contrario: Moralidad.
Este elemento ha pasado de alcalde a caradura sin solución de continuidad. Y lo ha hecho por muy socialista y por muy amigo de Zapatero que sea. Aunque, claro, viendo lo que los socialistas han hecho en Andalucía con los EREs, este desvergonzado debe pensar que todo el monte es orégano. También puede suceder que esto de los EREs vuelva loco a los socialistas. Así nos va. Espero que Francisco Fernández lo pague en las urnas.
Pinocchio