¡Se ha abierto la veda! Ahora todo el mundo a remangarse y preparar las armas. Toca apuntar al Rey y, si puede ser, a disparar contra él.
En este país somos así. La magia y la admiración nos dura un suspiro.
¿Qué es lo que ha hecho el Rey que no haya hecho en otras ocasiones? Viajar en privado para ir de cacería, probablemente la afición que más le gusta. La diferencia está en que en las anteriores ocasiones no le ocurrió nada y en este se ha partido la cadera. Mala suerte. ¿Cuántos elefantes, osos y perdices no habrá cazado el Rey? Pero no se había partido la cadera, es verdad. ¿Qué diferencia hay entra cazar en África y pasar las vacaciones en Marivent? ¿O es que el palacio balear no vale dineral? A todos nos parece bien.
Con este episodio los bienpensantes de izquierda y ultraderecha están aprovechando la ocasión para darle al Rey. Unos por la cosa de la República y otros por el arraigado franquismo que todavía fluye por sus venas. Y también anda por ahí el Anasagasti ese que parece que ve en la monarquía al mismo diablo. Así que, ¡venga, todos a darle al Borbón!
Pues resulta que el Borbón, a ver si se nos va a olvidar, fue el que paró el golpe de estado, ese que ocurrió el 23 de febrero de 1981. Sí, ese día en el que muchos políticos se fueron por las patillas. Como el Anasagasti ese. Pero parece que se nos ha olvidado.
A lo mejor es verdad que ha sido un error ir a cazar elefantes. Pero no es el único que tenía la escopeta preparada. Como se ha visto han sido muchos los que estaban esperando un error del Rey para remangarse y comenzar a disparar.
El Rey al que todo el mundo está lapidando ahora es el mismo Rey que los gobiernos de turno le encomiendan “trabajos” que los gobernantes no saben resolver. Es el mismo Rey que, hace tan solo unos días, viajó a Kuwait para pedirles a los monarcas árabes que exportaran petróleo a España. Es el mismo Rey del que se ha dicho que era el mejor embajador de nuestro país.
¿Cuál ha sido el error del Rey, ir de caza o partirse la cadera? ¿Y si se la hubiera roto en Kuwait o en cualquier misión diplomática en otro país?
¡Basta de hipocresía barata!
El Rey se merece esa cacería y cuantas se le antojen.
Si el Rey no hubiera estado en su sitio hace treinta años, lo más seguro es que Tejero y los suyos nos habrían cazado a muchos.
Ahora es muy fácil cazar al Rey. Pues, venga, sigamos así. A fin de cuentas es gratis…
Gracias Majestad por sus servicios a España. Todavía le queda mucho trabajo.
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Pinocchio