Italia tiende a buscar la resolución de sus problemas encomendado las tareas a ‘expertos’ o ‘ técnicos’, de ahí viene el mismísimo Monti, de una operación de adecuación de la instituciones italianas a las estrategias de Bruselas, atendidas de cerca por Alemania. Y de ahí parece que surge la ingenua idea de Napolitano, el presiente octogenario al borde la extinción de su mandato, de encargar a dos comisiones de ‘técnicos’ el estudio de las soluciones posibles a la crisis pos electoral.
Draghi ha llamado a Napolitano instándole a evitar su dimisión y aconsejando la fórmula de las comisiones de expertos
No es extraño, tampoco y tal y como se suceden los acontecimientos, que esto haya sucedido cuando el presidente de la República estaba barajando adelantar su dimisión al no lograr un acuerdo para formar gobierno estable, lo que hubiese implicado una llamada a las urnas menos de dos meses después de las anteriores que dieron la victoria a Bersani pero en un contexto de extrema dificultad.
Al parecer, Draghi, el presidente del Banco Central Europeo, ha llamado a Napolitano instándole a evitar su dimisión y aconsejando la fórmula de las comisiones de expertos. Una nueva iniciativa en la misma dirección, tal y como decíamos, de la tecnocracia ‘democrática’ y en esta ocasión instigada directamente y sin prudencia desde la institución que parece gobernar, mal gobernar, los destinos de Europa: el BCE.
El desprecio por la opinión pública del sur tan característico en la formas de hacer política por los jefes de negociado europeos, del norte, claro está, empujan insensatamente a los ciudadanos que padecen los rigores de la crisis a una percepción nefasta de los dirigentes y de los usos democráticos.
Preocupados como parecen estar, a instancias de Merkel, por Berlusconi, éste madura su estrategia de oposición a esta ‘Europa’ y, oponiéndose a estas comisiones fantasma, suma nuevos y activos apoyos en una mayoría social italiana harta de estos tejemanejes y asustada por las perspectivas chipriotas en sus propias espaldas, sobre todo viendo la incompetencia y la incapacidad para resolver los problemas que ellos mismos han creado en el pequeño país mediterráneo.
Editorial Estrella