1. Al igual que sus promesas electorales, los Presupuestos de Mariano Rajoy son también papel mojado. El Gobierno preparó sus cuentas para 2013 con la expectativa de que el PIB español caería este año solo un 0,5%. El brote verde no ha llegado y las nuevas previsiones esperan una caída del PIB del 1,6%: más del triple de lo que el Gobierno había calculado.
2. Por mucho que Rajoy presuma de haber evitado el rescate, la realidad es que España sigue intervenida y el Gobierno tendrá que entregar otra libra de carne a la troika y actualizar sus previsiones de ingresos y gastos. Será pronto, será mañana mismo, porque el Ejecutivo está obligado por la Comisión Europea a presentar este viernes el nuevo Plan Nacional de Reformas, con un nuevo cuadro macroeconómico: habrá que explicar en Europa de dónde va a salir el dinero, ahora que la recesión se agrava.
Por mucho que Rajoy presuma de haber evitado el rescate, la realidad es que España sigue intervenida
3. La troika ya ha avanzado que flexibilizará el objetivo de déficit para España: habrá dos años más para cuadrar las cuentas públicas. Sin embargo, estas bulas siempre obligan a penitencia, a una medida ejemplar con la que los alemanes puedan vender que se han cobrado la prórroga. Así que el Gobierno solo tiene tres opciones: subir impuestos, reducir gastos o ambas cosas combinadas.
4. El martes Rajoy anunció nuevos recortes. Pero el miércoles desmintió que vaya a subir los impuestos «este viernes». No sería la primera vez que su palabra no valga nada, y puede que el Gobierno intente vender una modificación de productos en los tramos del IVA, una nueva prórroga de la subida del IRPF o un céntimo verde, como un «recargo temporal de solidaridad» o algún otro eufemismo. Sin embargo, lo probable es que mañana los disparos vayan por el otro lado: por los recortes, y no por las subidas de impuestos.
5. ¿Elevar la edad de jubilación? ¿Eliminar la revalorización de las pensiones para que no estén ligadas a la inflación? Podría ser, pero parece improbable. Los recortes en las pensiones llegarán, pero es dudoso que se anuncien mañana porque su proceso lleva otro ritmo. El Gobierno acaba de crear un comité de expertos para estudiar la reforma de las pensiones, que pretende tramitar como ley. No sería muy elegante que, tras montar el comité, la reforma de las pensiones llegase por decreto y antes de que estos expertos se hayan pronunciado.
6. Sí parecen más probables una nueva vuelta de tuerca en la reforma laboral, otro endurecimiento en los requisitos para cobrar el paro, la anunciada liberalización de los servicios profesionales (abogados, farmacéuticos, notarios, registradores…) y la chipiritifláutica ley de emprendedores. Como siempre, el Gobierno intentará mezclar reformas y recortes, a ver si cuela.
7. También está en el bombo un nuevo golpe a los funcionarios. El compromiso de Cristóbal Montoro –el que recogió firmas contra la subida del IVA– es que este año no se eliminará la paga de Navidad de los funcionarios y que en 2014 devolverían los atrasos. No apuesten por su palabra. Una nueva eliminación de esa paga supondría 6.000 millones de ahorro este año. Es un golpe de efecto que, sin duda, la troika aplaudiría.
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Ignacio Escolar