La reciente captura de Joaquín Guzmán, más conocido como el «Chapo Guzmán», en Mazatlan, Sinaloa, representa un nuevo logro. Es un mensaje inequívoco del Presidente Peña Nieto de que no se va a arredrar ante el mundo del narco, que hoy controla partes suculentas de México.
¿Porqué el Chapo Guzmán? Era el jefe del Cártel de Sinaloa, el cártel más conocido. Estuvo preso en Guatemala pero se escapó. Varios estados estadounidenses, le buscaban con cuantiosas recompensas. De hecho, desde su última fuga en el 2001, se convirtió en el segundo hombre más buscado por parte del FBI e Interpol después de Bin Laden. Además la leyenda del máximo jefe del cártel de Sinaloa, le aupó incluso, a estar en la lista Forbes de los hombres más acaudalados del mundo.
El país se ha aglutinado en ser el más estable de América Latina
Pero el Presidente Enrique Peña Nieto pegó un golpe en la mesa y terminaron por encontrar al «Chapo». Se trataba de un aviso a todo el narco que intenta dominar algunos estados como Guerrero o Michoacán. Con esta dentención, el Gobierno Mexicano le echa un pulso inteligente al hampa. Se trata de una competición de poder, pero desde el intelecto, no desde la violencia. Porque el país, por lo demás, se ha aglutinado en ser el más estable de toda América Latina con posibilidades de crecimiento exponencial en la macroeconomía. 2013 cerró con un pequeño crecimiento pero los años anteriores llegó a crecer incluso por encima del quince por ciento. Se espera un sexenio con importantes aumentos en la economía.
Las reformas que ha emprendido Peña Nieto eran tan acuciantes como necesarias; especialmente la energética. El petróleo es y será siempre de los mexicanos. Sin embargo Peña, ha querido acabar con un nacionalismo atávico y abrir las puertas al capital extranjero para que deje sus emolumentos en el país azteca.
La reforma fiscal es también fundamental. La distribución de la riqueza debe ser más equitativa. De esa manera, esa maldita cifra de más de cincuenta millones de pobres, se verá disminuida. Pero hay otras reformas como la de las telecomunicaciones o la educativa. Todas ellas son importantes y han hecho que Peña haya cogido al toro por los cuernos. Es un toro que desde hacía años se necesitaba lidiarlo y, por lo tanto, domarlo. Sin embargo, nadie se había atrevido a hacerlo.
Muchos prefieren invertir en México que en otros países
La seguridad jurídica que ofrece México y su creciente economía sostenible, su tranquilidad social, su turismo creciente han hecho que muchas empresas españolas grandes, medianas y pequeñas opten, cada vez más, por emigrar al país azteca. La confianza genera seguridad. Por eso muchos prefieren invertir en México que en otros países como Brasil, que por mucho que ha crecido, tiene una burbuja económica que le puede explotar en cualquier momento, como ocurrió aquí.
El Presidente Peña lleva en el cargo algo más de un año. En ese tiempo ha acometido medidas de envergadura. En México, las elecciones son cada seis años sin capacidad de reelección. Sin embargo, aprovechando el momento tan favorable, México, puede convertirse en el interlocutor latinoamericano, no sólo con España si no con toda la Unión Europea.
El país va por buen camino. La prueba es que la crisis económica de Estados Unidos, de la que va saliendo, no le ha afectado a México. En otras ocasiones, el virus le habría pegado de lleno. Peña tiene la posibilidad de hacer un país líder y el tiempo corre a su favor.
Alberto Peláez