Corría el minuto 84… El ave del orden de las Cuculiformes, de plumaje de color café grisáceo, alas y cola verde bronce se aprestó a borrar la cal que marcaba el lado izquierdo del campo…
84 minutos antes…
Los dos equipos, Real Madrid y Barcelona saludan desde el verde de Mestalla. Suena la composición musical emblemática de una colectividad, el himno español. Pitos a un lado. Tarareo al otro. El Rey justo en el centro.
Comienza la representación. El Madrid no se descompone. Los culés no se desmontan.
Minuto 4. El llamado poltrón blanco, Isco, pasa en profundidad a Bale que se marcha por velocidad y dispara cruzado ante la portería que, se supone, defiende Pinto.
…Empieza a dominar el Barcelona.
Minuto 6. El galés se aprovecha de una jugada embarullada en el área y dispara con la derecha. Fuera. Pinto ve la pelota pasar como todos vemos a ese taxi que no se detienen ante nuestra llamada más allá de la una de la madrugada.
…El Barcelona ya tiene el control del esférico.
Minuto 10. Gol de Di María.
…Los blaugranas juegan en el campo del Madrid. La posesión del cuero es total.
Minuto 48. Gareth Bale atesora el balón. Con un regate corto deja sentado a Busquets y dispara al lateral de la red. Pinto, errático, saluda al ver pasar una cosa redonda a su lado.
…El “més que un club” acorrala al equipo de Ancelotti. El balón es blaugrana y su defensa central, Bartra, marca con la cabeza. El también defensa madridista, Pepe, se había ido a encargar una paella.
Minuto 71. Una contra del Madrid y el 11 blanco dispara sin pensarlo. Esta vez Pinto pasa por allí y el cuero golpea su cuerpo. No tiene la culpa. Ha sido sin querer.
…Los azulgranas acorralan a los merengues. Les presionan, les meten en su área.
Minuto 84. El ave del orden de las Cuculiformes, de plumaje de color café grisáceo, alas y cola verde bronce se apresta a borrar la cal que marca el lado izquierdo del césped. El 11 blanco recibe el balón en la zona media de su campo. Le espera unos metros más allá, Bartra. El expreso de los 100 millones se lanza un autopase e inicia una veloz carrera. Entonces, pegados a la cal, dos jugadores expresan la belleza del futbol. Cada uno a su manera. El galés es todo garra, potencia, fortaleza; el catalán es sinónimo de lozanía, todo cachaza. Son segundos que se hacen eternos y paralizan a más de 500 millones de personas que lo están viendo por la pequeña pantalla. Primero, el blanco galés recibe un empujón del central barcelonista en un desesperado intento de este por maltratar lo bello, el espectáculo. La respiración aumenta, en sus carreras les falta el oxígeno a ambos contendientes. Un esfuerzo, otro más y se plantea el final. Con la pierna izquierda Bale se coloca el esférico. Es su terreno, su jugada (ya la hizo en el año 2010 ante el Inter y con Maicon como oponente). Un paso más, dos… contrapone su cuerpo ante la persistencia de Bartra que le atosiga, mira a la puerta y ve a Pinto, un tipo alto y con coleta que más bien se está portando como un amigo durante todo el encuentro…
Lo que sigue es una escena feliz para aquellos del “tarareo” al compás del himno español. Un tipo alto y fuerte, rubio y rojizo, alza sus brazos al cielo y cierra los puños. Corre, grita, brama y enloquece. Celebra un gol. El de la victoria. El ave del orden de las Cuculiformes se muestra radiante, jubiloso.
…El Barcelona sigue dominando el juego. Controla el esférico. Neymar casi hace el milagro. Balón al poste. Casillas saldrá de Nazareno en la procesión del Viernes Santo.
¡¡¡¡¡ Fin del partido!!!!! Bale 2 – Barcelona 1
Su Majestad el Rey Don Juan Carlos, entrega la copa que lleva su nombre a los ganadores. Casillas se sube a lo más alto que encuentra y alza el trofeo al aire. Mientras, las manos de Su Majestad le sujetan la pierna izquierda para que no se caiga. Fue entonces cuando yo pensé: “claro, sujeta a uno de los que sí tararearon la composición musical emblemática de una colectividad”. Pero esto es harina de otro costal.
…Pd/ Según aseguran desde las oficinas del Camp Nou, su estrella Messi acudirá el sábado a disputar la final de Copa del Rey que se celebrará en Valencia el domingo 20 de abril.
JA Ovies