No sé a ustedes pero a mi me escandaliza que algunas de las políticas llevadas a cabo por Estados Unidos y Europa estén provocando dolor, caos y muerte, en lugares tan dispares como son Iraq o Ucrania.
En Iraq hay una guerra civil que está provocando muertos y miles de desplazados. Y aunque suene fuerte decirlo hay que decir que desde que Estados Unidos decidió la invasión lo único que ha conseguido es destrozar el país y que haya más inseguridad no solo allí sino en el resto del mundo.
Lo peor es que se han ido de rositas los responsables de aquella guerra, Bush y compañía, y en esa compañía hay que contar a Tony Blair y otros líderes europeos como nuestro José María Aznar. Me pregunto qué pensaran cuando ven Iraq inmerso en una guerra civil, todo un país destrozado que no ha levantado cabeza desde la invasión y que ha provocado amen de miles de muertos que también miles de familias hayan huido al exilio y ahora mismo malvivan en campos de refugiados. Esa es la herencia de Bush y de sus aliados.
Algunos dirán que Iraq se libró de Saddam Hussein, y sí, se libró de aquel sátrapa aliado de Estados Unidos hasta que dejó de responder a los intereses estadounidenses, pero en realidad igual de sátrapa y dictador que muchos de los actuales aliados de USA y Europa ¿quieren que repasemos los «amigos» que gobiernan el Golfo Pérsico por no ir más lejos? Desde luego no son un modelo de países democráticos. De manera que Estados Unidos no provocó una guerra en Iraq porque les preocupara que Saddam Hussein tuviera en un puño a su pueblo, sino porque convenía a los intereses norteamericanos, ni más ni menos. Y ni a Bush ni a sus amigos les importó tomar una decisión que ha destruido un país y provocado la pérdida de miles de vidas, de la misma manera que a la canciller Merkel, que es la que manda en la UE, y atendiendo a sus propios intereses, no le ha importado provocar un incendio en Ucrania que también ha devenido en guerra civil y todo a cuenta de un tratado comercial.
Al final los pueblos se convierten en marionetas de los poderosos que no le ponen rostro a los muertos y que envuelven con 'palabras engañosas' los motivos de su intervención. Ni a Estados Unidos le importaba que en Iraq hubiera democracia ni a la señora Merkel acompañada por el resto de la UE y de Estados Unidos, le importa un pimiento la democracia en Ucrania. Petróleo e intereses comerciales y sobre todo intereses geoestratégicos es lo que ha llevado a estos líderes mundiales a provocar estas tragedias.
Naturalmente cuentan con coros que repiten que todo lo que hacen es en nombre de la democracia, y hay gente que se lo compra, ya se sabe que la propaganda repetitiva tiene su efecto, pero cualquiera que analice con la mirada fría y sobre todo que sea independiente en su juicio, sabe que la intervención en Iraq ha sido peor que un fiasco, una gran tragedia, y que alimentar el enfrentamiento civil en Ucrania para entre otras cosas mandar un mensajito a Rusia, tiene como resultado una guerra civil en la que se están perdiendo vidas y miles de personas están padeciendo lo indecible.
Pero quienes toman estas decisiones carecen de algo fundamental que es vergüenza. Sus intereses geoestratégicos están por encima de la vida de millones de seres anónimos. Preparémonos para asistir ahora al segundo acto de la tragedia que hace años comenzó con la invasión de Iraq.
Julia Navarro