Algún día se podrá contar en detalle el trabajo que realizan sobre el terreno los españoles que pelean para que los yihadistas no cumplan su objetivo.
Este periódico digital ha recogido bastantes informaciones de esos hombres y mujeres que arriesgan su vida en las zonas más peligrosas de la tierra, pero la prudencia impide dar más datos, mejor no conocer sus nombres ni actividad concreta. Si se hiciera, su esfuerzo sería baldío; y hoy, por encima de todo, lo que importa es desactivar a las distintas facciones de Al Qaeda y del Ejército Islamista, que golpean mortalmente todos los días y que acaban de cometer un horrible atentado en Túnez que ha costado la vida, entre otros, a un matrimonio español al que sus hijos habían regalado un crucero por el Mediterráneo para celebrar sus bodas de oro.
La 'primavera árabe' en Libia fue un fracaso
No podemos quedar cruzados de brazos ante el yihadismo, que gana terreno y se hace fuerte en lo que ellos llaman estado islamista. No es tal, solo tienen territorio conquistado. Pero explican los que conocen sus movimientos, su estrategia y sus atrocidades, que lo que pretenden es hacer Estado en un país que ya no es Estado, Libia. Allí la “primavera árabe” ha significado un paso atrás, una catástrofe. Y el IS mira al país de Gadafi con ojos codiciosos. Vaya nuestro homenaje silencioso a los policías, guardias civiles y miembros de los servicios de información que se dejan la piel allí, para salvarnos la piel a todos los demás.
La campaña andaluza encara su último tramo conmocionada por los hechos de Túnez, pero los candidatos no pueden permitirse siquiera el lujo de parar unas horas porque de las urnas depende su futuro.
En el PP y en el PSOE tienen la sensación de que Podemos podría quedar con peor resultado del que auguran las encuestas, y en cambio piensan en los dos partidos mayoritarios que el subidón de Ciudadanos va a ser espectacular y se quedaría como tercera fuerza. Si es así, se convertirá en objeto de deseo de socialistas y populares porque aunque Susana Díaz –que va a ganar- está decidida a gobernar sin ningún tipo de coalición ni pacto firmado, con acuerdos parlamentarios puntuales, si no le salen las cuentas y el PP estuviera en condiciones de arrebatarle el gobierno a través de un acuerdo con Ciudadanos –siempre en función de los resultados, de lo que sumen-, entonces se plantearía cortejar a Albert Rivera para que le ofrezca un colchón de seguridad, una garantía de estabilidad.
En el entorno de Díaz no ocultan su satisfacción porque en esta campaña la presidenta en funciones que aspira a ser la presidenta de los próximos años, ha logrado que los andaluzas den por buena su palabra de que no se va a presentar a las primarias de julio en las que el PSOE elegirá candidato o candidata a La Moncloa. Será presidenta de los andaluces, aunque en el futuro ya se verá.
El PP andaluz sufre el desgaste del gobierno de un Rajoy que ha decepcionado por sus medidas
Juanma Moreno ha logrado remontar algo, pero queda lejos de repetir los resultados anteriores del PP. Ni es Javier Arenas ni la situación electoral es la misma. El PP andaluz sufre el desgaste del gobierno de un Rajoy que ha decepcionado por sus medidas de dureza; pero además, donde antes eran tres –en alguna ocasión cuatro- los que se repartían los escaños, ahora media docena de partidos se sentarán en el Parlamento andaluz, así que alcanzar la mayoría absoluta es misión casi imposible. O sin casi.
Como le ocurre a Esperanza Aguirre en Madrid. Desde su equipo, donde hay entusiasmo y ganas de ganar votos casa a casa, dicen abiertamente que Rajoy decidió finalmente que fuera candidata no solo porque era la que conseguiría mayor número de votos, sino porque sabía que efectivamente era misión casi imposible que fuera alcaldesa. Ya se verá en su momento, porque Esperanza Aguirre es mucha Esperanza Aguirre, aunque efectivamente lo tiene muy complicado. Su gente maneja la lista de las mesas en las que el voto del PP en las generales se perdió en las europeas, para volcarse de lleno en esos barrios. Pero Antonio Miguel Carmona, piquito de oro y hombre incansable, es un gran rival.
Pilar Cernuda