«Tu lo que quieres es que me coma el tigre, que me coma el tigre, mi carne sabrosa…». En qué horita se le ocurriría a Edurne aliarse con un tigre para presentar su videoclip de 'Amanecer', la canción con la que no va a pasar a la historia del Festival de Eurovisión.
Por si con las críticas al tema de todo el populacho no bastaran, salvo forofos de la diva o del certamen, ahora la coalición animalista internacional InfoCircos (la forman cuatro ONG's: AnimaNaturalis, ANDA, Born Free y Faada) poco más o menos que la tacha de «maltratadora» de animales por culpa de Noa, la tigresa que utilizaron en su videoclip. Como ésta no puede hablar (a lo mejor también tiene la culpa de ello la cantante), reclaman la retirada inmediata del mismo y recogen firmas para ello a través de la plataforma Change.org.
Como la chica es rubia, y por tanto debe ser tonta para estos defensores de los animales de cuatro patas, le recuerdan que «Noa no es un peluche, sino un animal con necesidades que no se cumplen trabajando«, y que sus dueños la fuerzan a veces «a realizar comportamientos no naturales en entornos extraños».
En el comunicado de su denuncia incluso hablan de amputaciones de «partes peligrosas«, en el caso de ‘Noa’ las uñas. ¿Se las habrá cortado Edurne o habrán sido José María Íñigo o Anne Igartiburu, los otros dos rostros visibles de TVE en el certamen?
Para la portavoz de InfoCircos, «Noa representa a los millones de animales que sufren para enriquecer a sus dueños». Vamos lo que podría aplicarse a cualquier currito español, de dos patas, que no sea autónomo.
¿A quién se le puede ocurrir cortarle las uñas a un animalito así de cariñoso? ¿Cómo es posible que no se le haya dado de alta en la Seguridad Social ni chuletones de primera durante el rodaje del spot ni se le haya puesto una finca a su disposición en cualquier dehesa española para sus vacaciones? ¿A dónde vamos a llegar?
Menos mal que a Edurne no le ha dado por emular paso a paso la canción de «la Faraona», cuando cantaba eso de «entonces me monto en la loma, me subo en el árbol, me tiro en el río. El tigre se monta en la loma se sube en el árbol se tira en el río. Entonces me salgo del río me meto en mi casa donde no me vea. El tigre se sale del río se mete en mi casa la cosa está fea».
Fea no, feísima estaría ahora la cosa si Noa se hubiera acostado con Edurne. A la cantante la podrían haber acusado de cualquier cosa, desde lesbiana viciosa a depravada sexual que se aprovecha de otro ser sin raciocinio. La duda es si a estas horas la cantante estaría condenada de por vida a prisión o si la habrían colgado en las verjas de algún zoo, para que los animales comprobaran que la justicia en este país es igual para todos.
La verdad es que una no sabe dónde vamos a llegar ya en un país en el que incluso se está a punto de aprobar una ley de tráfico por la que se podrán hacer controles de alcoholemia y drogadicción… ¡A los peatones!. A este paso no se podrá salir de casa, no vaya a ser que ofendas a alguien por mirarle y te metan un paquete. Torquemada sería feliz hoy en día.
La mosca