La tabla Ouija, utilizada como una forma de intentar contactar con los espíritus del más allá, conlleva riesgos y peligros ocultos que a veces no se han considerado. Por desconocimiento o simplemente curiosidad, puede resultar una práctica muy arriesgada.
Este instrumento se basa en un tablero de madera, en el que aparece el abecedario, los números del 0 al 9 y las palabras si y no. A esto de suma un puntero triangular que los participantes mueven para formar palabras y frases.
La primera que salió al mercado fue en 1880 inventada por Elijah Jefferson Bond. El nombre de Ouija, correspondería a una antigua palabra egipcia, cuyo significado era «mala suerte».
Su inventor la diseño con el objetivo de intentar contactar con personas que nos dejaron. Como familiares, parejas, amigos etc, pero con el riesgo de que se abra una puerta a lo desconocido.
Desde que salió a la luz, la tabla espiritual ha generado muchas críticas y opiniones, tanto por parte de la Iglesia, especialistas en esoterismo o exorcistas.
Desde su creación se han producido diferentes episodios con resultado de muerte o locura, donde la Ouija podría estar detrás de dichos sucesos.
Aparición de la película «El exorcista»
Uno de los claros ejemplos se trataría de una de las películas más terroríficas de todos los tiempos, «El exorcista». Dirigida por William Friedkin en 1973, tiene su origen en un caso real a un adolescente de 13 años en Connectica allá por 1949.
Según se supo con los años, comenzó cuando el chico y una tía de la familia, utilizaban la Ouija como método para contactar con seres del más allá. Esa circunstancia provocó con toda probabilidad la entrada de algún espíritu demoníaco que poseyó al joven.
Debido a ello, su familia tras consultar con numerosos expertos, decidió que se le practicase un ritual de exorcismo. Estas sesiones se prolongaron durante semanas, hasta que los sacerdotes pudieron expulsar la presencia del diablo en su cuerpo.
Sin embargo, hay una teoría que dice que realmente no fue así. Si no que dicha presencia de mal en su cuerpo pasó a uno de los sacerdotes allí presente durante las sesiones. Al parecer se «sacrificó» para que el niño tuviese una vida normal y el religioso pasó sus últimos años recluido en un convento.
Ed y Lorraine Warren, el matrimonio experto en casas encantadas
Años más tarde, durante la década de los 70 y 80, Ed y Lorraine Warren, conocidos mundialmente como el matrimonio Warren, considerados expertos en casas encantadas y situaciones de esoterismo, comprobaron que detrás de algunos de esos fenómenos, tenían su origen en la tabla Ouija.
Todas las experiencias vividas fueron documentadas durante años en varios libros y programas de televisión de la época. o que hizo que se hicieran mundialmente famosos.
A raíz de sus investigaciones, crearon un museo con todos los elementos, muñecos y demás figuras maléficas. Con el fin de que no pudiesen torturar más a sus víctimas. Sirva como ejemplo el caso de la muñeca Annabelle, guardada bajo llave en una de las vitrinas, con un mensaje claro, «No abrir».
Uno de los consejos más claros que trasladaron en su vida a la opinión pública, es que «no jugasen con una tabla Ouija«. Debido al riesgo que conllevaba, por la posible entrada de espíritus malignos. «Eso no es un juguete de entretenimiento«, afirmaba Ed en una de sus múltiples intervenciones ante los medios.
En España tenemos el caso de la joven Estefania Gutiérrez Lázaro de 16 años, que en 1991 murió en extrañas circunstancias, días después de haber practicado sesiones de espiritismo con unas amigas.
Su intención al parecer, era ponerse en contacto con su antiguo novio, que murió en un accidente de moto.
Desde ese momento, empezaron a sucederse fenómenos extraños, donde afirmaba ver presencias oscuras en su casa del barrio de Vallecas.
La familia de Estefania no encontraba explicación a los que sucedía en esa casa. Donde se escuchaban ruidos y se movían muebles de la vivienda solos.
Murió días más tarde en un hospital como resultado de «muerte súbita«, según la autopsia practicada. El director Paco Plaza hizo de este caso una película titulada «Verónica» en 2017.
R.F.