Joyce Dahmer, la madre del asesino en serie Jeffrey Dahmer, nació en 1936 y crio a su hijo junto a su marido Lionel desde que le dieron a luz en 1960. La pregunta es ¿qué fue de ella?, ya que su familia está ahora de actualidad tras el estreno de la serie de Netflix, sobre los brutales crímenes de su vástago.
En el libro que público su esposo en 1994, «La historia de un padre«, relata como su mujer sufría de depresión, era hipocondríaca. Posteriormente y tras su segundo emabarzo le diagnosticaron psicosis posparto.
Pasó la mayor parte de su infancia en Wisconsin. Joyce se casó con Lionel y la pareja dio a luz a su primer hijo, Jeffrey Dahmer, el 21 de mayo de 1960. Seis años después, dieron la bienvenida a su segundo hijo, David.
Estuvo casada 19 años hasta que solicitó el divorcio en 1978, obtuvo custodia de David y se mudó a Fresno, California, donde trabajó en una casa de retiro. En 1991, se convirtió en administradora del Equipo de SIDA de Central Valley, donde sus compañeros de trabajo la encontraron » capaz de tener una gran empatía por las personas con VIH «.
La reacción tras conocer los asesinatos
Tras la detención de su hijo y la acusción de 17 asesinatos, su madre quiso suicidarse pero sobrevivió al intento. Según All That’s Interesting, encendió su horno de gas, dejó la puerta abierta y escribió una nota de suicidio que decía:
Cuando Jeffrey fue condenado a 15 cadenas perpetuas, reconoce que hablaba por teléfono con su hijo al menos una vez a la semana. En una ocasión le preguntó si todavía tenía estos impulsos y él respondió: «Sí, mamá, estoy tan contento de estar encerrado. Tendría miedo de lo que haría si no estuviera en la cárcel».
Creía que sus impulsos provenían de algo externo a él y que quería ser una buena persona. Su deseo de hacer el bien fue una de las principales razones por las que Joyce luchó para salvar el cerebro de Dahmer, después de que sus restos fueran incinerados.
Sin embargo, la muerte de su hijo en prisión en 1994 por otro preso la perseguiría e intentó quitarse la vida en más ocasiones. Su pretensión de ayudar a los demás, la animó a fundar «The Living Room», un centro de VIH que abrió sus puertas en 1996.
El 27 de noviembre de 2000, Joyce falleció a los 64 años de cáncer de mama. Sus amigos y compañeros de trabajo en una entrevista a Los Angeles Times, afirmaron que la recordarán como una mujer amable y compasiva conocida por ayudar a los pacientes con SIDA.
Su exmarido Lionel sigue vivo a día de hoy con 87 años, pero desde hace 2 años dejó de estar en el foco de la opinión pública y no quiso participar de algún modo en la serie de Netflix.
R.F.
Interesante, gracias.