Sobre unos tacones de más de quince centímetros y enfundada en un minivestido fucsia de Manuel Mota para Pronovias, la modelo rusa, de 24 años, visitó la pasarela Madrid Fashion Week, donde presentó una botella joya de vodka, de edición limitada, y brindó por la moda de España.
Es la primera vez que la modelo visita España por motivos profesionales. «Estoy encantada de estar aquí, es un país maravilloso, comentó.
Irina Shayk tiene firmados varios proyectos, entre ellos una sesión fotográfica en una isla española, «así que -dijo- podré disfrutar más del país».
Aunque no conoce el diseño español «como le gustaría, reconoció que la moda que se hace en España es atractiva. «Me gustan las creaciones españolas y me entusiasman los diseños de Amaya Arzuaga».
Con gran simpatía y mucha paciencia, la modelo rusa, que lucía espectaculares joyas de Chopar, sonrió una y otra vez para todos los fotógrafos. «Qué buenos fotógrafos y profesionales hay en España, dijo, mientras les lanzaba besos y se atusaba su larga melena con coquetería.
Por su profesión de modelo, Irina Shayk, que vive en Nueva York, confesó que no dispone de mucho tiempo para compartirlo con su novio, Cristiano Ronaldo, CR7, que reside en Madrid. «Viajo constantemente por todo el mundo, casi vivo en los aviones, explicó.
¿Qué te parece Ronaldo como padre? ¿Cómo es el futbolista en la intimidad? ¿Qué piensas de que pueda tener otras novias? o ¿Eres celosa? fueron algunas de las preguntas que la modelo recibió con sonrisas y con estudiadas parrafadas sobre la firma que estaba promocionando.
Tampoco quiso desvelar si en un futuro hará alguna campaña de publicidad junto a su novio, que ya ha ejercido de modelo en varias ocasiones, y con gran éxito.
Ante tanta cuestión negada sobre el futbolista del Real Madrid, se le preguntó que cómo era ella en las distancias cortas y, sin dudar un segundo, abrió su enormes ojos verdes y afirmó: «Las mujeres rusas somos muy peligrosas».
Su belleza y simpatía despertó tanta admiración que un periodista se atrevió a pedirle su número de teléfono, a lo que ella, con gran sentido del humor, sonrió y brindó por la moda española.
La modelo rusa, que ha desfilado en varias ocasiones con los diseños de lencería de Victoria’s Secret y ha sido imagen de prestigiosas firmas, desde que se hizo oficial su romance con Cristiano Ronaldo, se ha convertido en una de las maniquíes más demandadas de las pasarelas.