A E. L. James le ha salido una dura competidora, Mandy Smith, auxiliar de vuelo en Virgin ha sacado a la luz un libro autobiográfico donde desvela la parte más desconocida de esta profesión de altura.
Su 'Cabin Fever: The sizzling secrets of a Virgin air hostess' desvela las anécdotas vividas por la propia Mandy en sus casi veinte años de profesión. Fiestas, alcohol y mucho sexo que rivalizan con la propia Anastasia Steele en su relación con Christian Grey.
Un '50 sombras de Grey' en los aires que comienza con algunas declaraciones tan fuertes como: «Con frecuencia, me tocaban el culo cuando pasaba a cerrar los compartimentos de las maletas», y continúa asegurando: «Mi maleta estaba más preparada para una reunión de tupper-sex que para viajar».
Mandy relata con todo lujo de detalles las fiestas que celebraban entre vuelo y vuelo. «En Barbados casi rompemos el jacuzzi entre mis compañeras y los jugadores de un equipo de rugby», y en «Johannesburgo las fiestas en el hotel Intercontinental eran geniales. Todas las noches me hacían alguna proposición indecente», asegura la azafata.
Pero la mejor fue una celebrada en la casa del CEO de la compañía, Richard Branson: «Nunca he visto tanto champán junto. En mi vida. Richard se apañó para empaparnos a todos al abrir las botellas, cuenta, me mantuve en pie 24 horas gracias al vodka y el Red Bull«.
Mandy Smith: «Robbie Williams no fue capaz de quitarse los vaqueros solo»
Mandy también cuenta algunos affaire vividos por los pasajeros: «Un hombre de negocios que viajaba en business se llevó a una chica joven al bar. Se tomarno unas copas y empezaron a intimar. Cinco minutos después, apareció su esposa. Estaba sentada en clase turista y casi mata al marido».
Las celebs no se quedan atrás, Mandy destapa alguno de sus secretos como la anécdota que vivió en pleno vuelo con Robbie Williams: «Era muy amigable, pero cuando la gente empezó a pedirle autógrafos se volvió un narcisista. Me pidió un pijama para dormir y no fue capaz de quitarse los vaqueros solo».