Lo normal es irse a una de las múltiples fiestas que tienen lugar esa noche en Hollywood, en las que uno sabe cuándo llega pero no cuándo va a salir, ya sea para celebrar un premio o para olvidar el fiasco de no lograrlo, pero Halle Berry optó por algo muy distinto cuando terminó la ceremonia de los Oscars.
La actriz, que eligió un vestido de Versace dorado y negro para acudir a la deremonia de entrega de los Oscar, modelo que lució con el pelo tipo afro, que, según las expertas estilistas, no resultaba nada favorecedor a la actriz, parece que decidió poner fin a las numerosas críticas recibidas por este estilismo de su pelo subiendo la temperatura en su cuenta de Instagram, en la que cuenta con 1,1 millones de seguidores.
Ahí, en esa red social, Halle protagonizó un sexy strisptease, de tal manera que las críticas se tornaron en elogios y piropos. Sin duda fue una de las grandes triunfadoras de la noche, pese a no haberse llevado esta vez ninguna estatuilla por sus méritos profesionales.
La actriz de 50 años mostró su espectacular figura a sus seguidores, en un video en el que se la ve cómo va recorriendo de forma pausada su jardín, hasta que se quita el vestido y se lanza a la piscina. Más de 240.000 visionados y 1.178 comentarios demuestran la buena acogida.
Para que su interpretación fuera perfecta (algunos la hubieran dado un Oscar, pese a salir sólo de espaldas), Halle eligió el tema de Bruno Mars 'Versace on the floor', en cuya letra se puede escuchar: «Así que, bebé, apaguemos las luces /Y cerremos la puerta /Oooh amo ese vestido /Pero ya no lo necesitarás /No, ya no lo necesitarás /Besémonos hasta estar desnudos, bebé /Versace en el suelo /Oooh quítatelo para mí, para mí, para mí, para mí, para mí, chica /Versace en el suelo». Toda una 'performance' perfectamente elaborada.
M. A.