El juicio por esta demanda de paternidad se celebra en el Juzgado de Primera Instancia número 13 de Valencia, a puerta cerrada y sin la presencia del cantante, que ni siquiera ha sido citado, ya que anteriormente se negó a someterse a una prueba que validase o confirmase el análisis de ADN que presentó el demandante.
Javier Sanches-Santos se ha limitado a decir a su llegada a la Ciudad de la Justicia de Valencia que está «tranquilo» y que se acerca el cumpleaños de su madre y quiere hacerle «un buen regalo».
La prueba de ADN fue obtenida en Miami por un detective privado contratado por Osuna, a partir de objetos que arrojó a la basura en una playa Julio José Iglesias, uno de los hijos del cantante.
«Nuestra prueba es rotunda, pero no plena en el sentido que no ha sido contrastada de forma imparcial. Pero si a eso añadimos la negativa de Julio Iglesias a someterse al contraste, la ley le convierte en padre y hay que aplicar esa ley», ha agregado Osuna.
«Con estos datos, la prueba de ADN, se llamó a Julio Iglesias para contrastar, pero todavía le estamos esperando; y lo cierto es que las leyes sancionan al padre que se niega, hay jurisprudencia», ha advertido.
Por el contrario, la defensa del cantante, que ejerce el letrado castellonense Fernando Falomir, insistirá en que este mismo asunto está ya juzgado en tres procedimientos anteriores: dos en Valencia -1991 y 1992- y uno en Marbella en 2004, sin que en ningún caso prosperase la demanda.
Falomir explicó recientemente a EFE que, en caso de que el juez estime que es necesario continuar adelante con la causa, el cantante se sometería a la prueba de ADN.
En este sentido, Osuna ha explicado que «si la contraparte se ofrece a someterse a la prueba de ADN no tendremos inconveniente en que sea así, pero en un plazo corto y como una diligencia complementaria».
«Sería absurdo que desde el punto de vista científico Javier fuese hijo de Julio Iglesias y que por cuestiones procedimentales no fuese así», ha concluido Osuna, quien ha insistido en que el hecho de que hoy se vaya a celebrar el juicio evidencia que no existe la cosa juzgada, como alega la contraparte.
Los dos únicos testimonios que previsiblemente se escucharán este jueves en la sala de vistas serán los del detective que consiguió el material genético, que deberá informar sobre cómo lo obtuvo, la forma en que lo conservó y trajo a España, y el de los técnicos del laboratorio zaragozano que los analizó, que darán detalles técnicos sobre el método de análisis y la fiabilidad del mismo.
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