El total de fallecidos, con los 440 de hoy, supera los 22.000, si bien esta cifra sólo incluye a los diagnosticados mediante pruebas, y no a los que murieron con síntomas que se pueden vincular con la COVID-19, la mayoría de ellos en residencias de mayores de Madrid y Cataluña, cuyos gobiernos regionales cuantifican en 3.932 y 4.803 más de los notificados al Ministerio de Sanidad.
Los óbitos casi siempre remiten a un contagio que se habría producido entre dos semanas y media y un mes antes, y sólo permiten ver lo que fue la epidemia en ese periodo. Para ver su evolución actual, la variable más consultada son los positivos diarios, sobre los que no se pueden hacer comparaciones homologables desde el pasado día 15, en que se rompió la serie estadística con la irrupción del aumento de test.
MENOS POSITIVOS DE LOS ESPERADOS
Ya se venía advirtiendo desde semanas precedentes de que la generalización de las pruebas diagnósticas, más si eran serológicas -que miden no quien está infectado, sino quien lo ha podido estar- aumentarían de forma muy significativa los positivos, como parece que ha ocurrido.
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha dicho hoy que el repunte “ha sido menor del esperado, aunque tengamos un incremento importante del número de pruebas, lo que indica que la epidemia va incluso mejor de lo que pensábamos”.
Con menos elocuencia y sin calificativos apunta en esa dirección el número básico de reproducción, es decir, los casos nuevos que puede generar un infectado y que tiene que estar siempre claramente por debajo de 1, que es donde se sitúa actualmente la media en España, aunque hay cinco autonomías todavía por encima de ese umbral: Cantabria (1,23), Ceuta (1,21), Madrid (1,13), Cataluña (1,07) y Galicia (1,02).
La apreciación de Sanidad sobre el curso de la epidemia la comparte en cierta medida el director para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Hans Kluge, quien ha subrayado este jueves que la segunda misión de este organismo en España ha confirmado una «alentadora tendencia a la baja de los casos de Covid-19», aunque ha pedido cautela en la fase de alivio de restricciones.
El informe de la OMS señala que España ha aumentado su capacidad de hacer test para detectar nuevos casos y de la atención en cuidados intensivos, lo que, unido a las medidas de distanciamiento social, ha permitido comenzar a relajar sus medidas de confinamiento.
MENORES, ADULTOS Y MAYORES
La primera de esas medidas será la salida desde el domingo a la calle de los menores de 14 años que, según se ha concretado hoy, podrán hacerlo, siempre acompañados de un adulto, durante una hora, entre las 9 de la mañana y las 9 de la noche, en un kilómetro alrededor de su domicilio y podrán llevar sus juguetes, incluidas pelotas y patinetes, aunque no ir al parque.
El vicepresidente de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, ha precisado que el acompañante, que también podrá ser un hermano mayor de edad, podrá salir con hasta tres niños que convivan él y tendrá que ser responsable en todo momento de las medidas de distanciamiento social, aunque los menores podrán saltar, correr y hacer ejercicio.
Precisamente hacer ejercicio al aire libre es otra de las reivindicaciones, en este caso de los adultos, que podría ser la siguiente medida para aliviar el confinamiento, como también lo será la posible salida de los mayores en la que, según ha dicho hoy el ministro de Sanidad, Salvador Illa, está trabajando con la premisa de que tenga “todas las garantías de seguridad».
En torno a esa seguridad y las personas mayores giran algunos de los planes de futuro ante posibles rebrotes del virus una vez que se inicie la fase de desescalada e, incluso, mas allá, cuando llegue el otoño y eventualmente el coronavirus tenga que convivir con la gripe común.
En su comparecencia semanal en el Congreso, Illa ha anunciado que ha firmado en los últimos días una orden de compra de vacunas superior a la habitual para el periodo de la gripe del próximo otoño-invierno con el fin de prevenir saturaciones en el mercado.
El ministro también ha informado en esa sesión parlamentaria de que se ha recuperado «hasta el último céntimo» de los 17 millones de euros del coste de las mascarillas Garry Galaxy, de las cuales un lote resultó defectuoso. En un comunicado conjunto, los Consejos Generales de Colegios Oficiales de Médicos, Dentistas, Enfermería, Farmacéuticos, Fisioterapeutas, Podólogos y Veterinarios han expresado su «indignación» y han exigido que se les hagan test.
EL VIAJE DEL VIRUS
En todo el mundo se están secuenciando los coronavirus de los pacientes de cada país y los resultados se incluyen en una gran base datos que permite trazar el viaje de cada virus.
En el caso de España se apunta que el SARS-CoV-2 estaba ya presente desde mediados de febrero y que entró por “multitud” de vías, según un estudio centrado en 28 genomas del virus analizados para conocer su difusión, firmado por científicos del Instituto de Salud Carlos III de Madrid y el Hospital Clínic de Barcelona.
Uno de los autores del estudio, José Alcamí, ha explicado en declaraciones que el origen de la epidemia en España “no tuvo un paciente único o paciente cero, sino que vino por múltiples entradas de distintos países a mediados de febrero, que es antes de que se detectara que había una transmisión comunitaria en España”.
La investigación, que aún no ha sido sometida a revisión por otros expertos, pone de relieve “el extraordinario potencial del SARS-CoV-2 para una rápida y amplia difusión geográfica» por personas que llegaron del extranjero, pero también por otras que habían estado fuera del país, y cita como ejemplo el partido de fútbol de la Champions a mediados de febrero entre el Atalanta y el Valencia, jugado en Milán.
Desde España, añade Alcamí, el coronavirus se pudo diseminar hacia Estados Unidos, Holanda, Chile, Brasil, Georgia y Francia: “Es un poco la dinámica de las epidemias, somos fuente y destino de infección”.
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