En un comunicado, el director de Seguridad y Prevención de la Federación, Francisco Cano, ha señalado que durante el primer mes de vigencia del estado de alarma, hasta el 13 de mayo, se produjeron nueve fallecimientos por ahogamiento no intencional, una cifra que se ha duplicado durante el mes posterior, hasta las 22 muertes.
Esto ha hecho que «los espacios acuáticos se estén volviendo a convertir en escenarios dramáticos», según Cano, que se basa en los datos provisionales de este domingo, recogidos en el Informe Nacional de Ahogamientos (INA).
Según este informe, hasta 82 personas habrían fallecido en espacios acuáticos por ahogamiento en lo que va de año, el mismo número que se alcanzó el año pasado el 30 de mayo.
«Este es un dato que llama a la alarma, ya que en 2020 no se ha celebrado la Semana Santa, época en la que se suelen utilizar masivamente las playas marítimas, y, además, ha habido un periodo de casi absoluto confinamiento de la totalidad de la población», ha lamentado.
Además, Cano ha explicado que este año se estaba observando una tendencia a la baja en la pérdida de vidas humanas en los espacios acuáticos, y el dato del primer trimestre fue el segundo mejor desde que en 2015 la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo comenzó a elaborar el INA.
Por ello, el responsable de Seguridad y Prevención ha recordado que la primera regla en el uso de los espacios acuáticos es «ser capaces de cuidarnos a nosotros mismos y de cuidar a los nuestros».
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