Con tres fallecidos desde que comenzó la pandemia, la tasa de mortalidad en las cárceles es diecisiete veces inferior al del resto de la población y la de hospitalización, con cuarenta internos, cinco veces más baja, según el estudio elaborado por la Subdirección General de Coordinación de la Sanidad Penitenciaria.
Una gran mayoría de asintomáticos
El 87 por ciento de los diagnósticos de presos de la segunda ola de la pandemia son casos asintomáticos y en 25 de los 71 centros dependientes de Instituciones Penitenciarias del Ministerio del Interior no se ha registrado ningún caso, lo que supone el 35 por ciento.
Con un dato acumulado de 783 casos confirmados desde el pasado mes de marzo la tasa de incidencia acumulada es de 1.665 casos por cada cien mil internos frente a la de la población en general que se sitúa en 3.686. Los cuarenta internos que precisaron ingreso hospitalario supone 0,85 por cada cien mil desde el inicio de la pandemia.
85 casos en la primera ola
En la primera ola, durante el primer estado de alarma y con todas las prisiones cerradas, de detectaron 85 casos: Dos fallecimientos, 17 ingresos en hospital, 34 casos leves y 32 asintomáticos Desde el 21 de junio, con el levantamiento progresivo de las restricciones en las cárceles, hasta el pasado día 14 se diagnosticaron 698 positivos con un fallecimiento, 23 hospitalizados, 92 casos leves y 582 asintomáticos.
Es decir la principal variación entre la primera y la segunda ola son los diagnósticos de casos asintomátivcos, un 87 por ciento del total en la última, lo que Instituciones Penitenciaria atribuye a la búsqueda activa de casos entre los contactos mediante la realización de pruebas diagnósticas.
La Secretaria General de Instituciones Penitenciarias destaca que el Defensor del Pueblo, en su informe sobre ‘Actuaciones ante la pandemia‘, ha elogiado «la eficacia» con la que se ha gestionado la crisis sanitaria en las cárceles.
«Se tomaron precauciones para impedir o limitar el número de contagios, hubo mucha información en los módulos para concienciar a los internos y se utilizó la videoconferencia para compensar la supresión de visitas», explica el Defensor del Pueblo, que subraya además que «se procuró atender todas las quejas» relativas a las medidas tomadas para evitar la extensión de la pandemia.
Cuatro trabajadores de Instituciones Penitenciarias han fallecido por el coronavirus, concretamente funcionarios de las prisiones de Alicante, Cuenca, Soria y Teruel.
El acumulado de positivos de la segunda ola entre los trabajadores de las cárceles es de 689. EFE
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